Son muy especiales los partidos que enfrentan al CD Castellón y el Borriol CF. Lástima que mañana se enfrente un equipo que aspira a ascender a Segunda División B y otro que intenta evitar el descenso a Regional Preferente. La escuadra borriolense, desde que ascendió a Tercera División, se ha convertido en un refugio para los muchos jugadores del conjunto albinegro o de su cantera cuando estos abandonaron la disciplina castellonense. Jóvenes, y algunos no tan jóvenes, que demuestran que pueden competir en esta categoría nacional, aunque en muchos casos no en un equipo como el Castellón al que le urge salir de esta categoría lo antes posible y se marcha dicho objetivo temporada tras temporada.

En el actual Borriol 2017-18, sobre una corta plantilla de dieciocho futbolistas, once de ellos han militado en alguna categoría inferior del club de la capital de la Plana y cinco de ellos llegaron a debutar en el primer equipo. Una cifra que no es más alta porque entre diciembre y enero pasado hasta cuatro jugadores abandonaron la disciplina del equipo borriolense, como es el caso de Javi Troncho (se marchó al Almazora), Álex Salt (Cristo Palencia), Pedro Hidalgo (Sant Jordi) y Víctor Felip (Extremadura).

De los que llegaron a debutar en el primer equipo del Castellón y jugar allí varias temporadas, incluso en Segunda División A, se encuentra el central Pepe Mora, veterano y uno de los puntales del Borriol que dota de experiencia al bloque rojillo. También tuvieron sus minutos y partidos en la primera plantilla albinegra el portero Carlos Sabater, Patxí Dávila (lo hizo en la Copa RFEF) y Jesús López, así como el centrocampista Gerard Hernando.

Y lo hicieron en categorías inferiores los zagueros Lalo Asín, Alberto Miró y Javi Mora, o los mediocentros Nahum Mingol y Sergi Ripollés. En cambio, nunca vistieron de albinegro Badre El Yousfi, Pascual Font de Mora, Mario Gallego, Dani Máquz, Martí Prera, Omar Zafont y Adrián Villarrubia.

Otro ex albinegro en las filas del Borriol es su técnico, el joven Jacint Guimerá, de tan solo 25 años. El actual preparador de la escuadra borriolense jugó en las categorías inferiores del Castellón (acabó en el filial) y, además, estuvo de entrenador y de preparador físico en equipos base.

Todos ellos vivirán mañana una situación especial ya que no solo podrá enfrentarse al que un día fuera su equipo y algunos de sus compañeros sino porque tendrán la oportunidad de jugar en un estadio como Castalia ante un importante número de aficionados que a buen seguro llenarán la grada pese a tratarse de jornada intersemanal.