La Cátedra Ciutat de Castelló, impulsada por convenio entre el ayuntamiento de la capital de la Plana y la Universitat Jaume I, será dirigida por el vicerrector de Economía, Miguel Ángel Moliner, pero destaca sobre todo la presencia del profesor de Finanzas y Contabilidad, Juan Ángel Lafuente, que junto a Moliner será la persona que integre la comisión mixta de seguimiento que deberán formar ambas instituciones.

Lafuente supuso hace un año la que ha sido hasta la fecha gran crisis política entre los partidos que forman parte del Pacte del Grau. En febrero del año pasado la alcalcadesa, Amparo Marco, apostó por Lafuente como director de la Oficina de Planificación y Proyección Económica del ayuntamiento, una designación que dejó solos a los socialistas ya que ni siquiera Compromís y Castelló en Moviment la avalaron. El problema para Juan Ángel Lafuente fue que estaba dentro de la lista electoral socialista para los comicios de 2015, aunque no obtuvo plaza al ser siete los concejales elegidos y quedarse él a las puertas al ocupar el puesto octavo.

El profesor universitario siguió con su carrera profesional en la Jaume I pero la sorpresa vino en enero de 2016, cuando la edil socialista Carme Oliver anunció su dimisión. Lafuente tuvo la ocasión de ser concejal, pero decidió renunciar al preferir seguir con su trabajo en la UJI, por lo que fue Carmen Ribera la nueva edil socialista.

Con este baile político de fondo, en febrero de 2017 se dio a conocer el nombramiento de Juan Ángel Lafuente para encargarse de la Oficina de Planificación y Proyección Económica, una decisión que desde Compromís y Castelló en Moviment se consideró inadecuada, los primeros muy críticos por la presunta falta de información aportada por sus socios socialistas, y los segundos, por considerarla poco ética al recordar que Lafuente rechazó en 2016 ser concejal, con un sueldo medio de unos 40.000 euros anuales, y un año después aceptó ser designado como director de la citada oficina, con ingresos estimados en más de 70.000 euros.

La polémica fue tal que la Junta de Gobierno acabó por cesarlo en mayo de 2017 y abrir un procedimiento de selección de candidatos para la citada Oficina, a la que el propio Lafuente se presentó. La plaza, finalmente, fue para Carmen Vilanova, que hasta la fecha era jefa del Servicio de Promoción Económica y Relaciones Internacionales de la Diputación de Castellón. Juan Ángel Lafuente, por su parte, tiene recurrido su cese ante los tribunales. Pese a este conflicto de fondo, ahora vuelve a ser una de las personas que, por parte de la UJI, se encargarán de controlar el desarrollo de una Cátedra por la que el ayuntamiento abonará anualmente a la Jaume I 75.000 euros, según el convenio firmado en febrero entre el consistorio y la UJI.

La Cátedra Ciutat de Castelló tiene como objetivo de fomentar el talento, la formación, la investigación, la difusión del conocimiento y la cultura, y la innovación en el espacio geográfico de la capital de la provincia.

El ámbito de trabajo abarca todas aquellas áreas que son competencia municipal como la gobernanza, economía, comercio y turismo, ocupación, social y solidario, cultural, urbanismo, calidad de vida y sostenibilidad, o deporte, entre otros. Se promoverá la ciudad como sede universitaria, la participación de la universidad en el análisis objetivo de los problemas y situaciones de especial incidencia o preocupación por el municipio y que mejoran el talento de la ciudadanía. Entre las acciones que se realizarán en el marco de la Cátedra están la ejecución del plan estratégico de la ciudad y la realización de informes y estudios en ámbitos como las políticas de igualdad y género, la sostenibilidad social y el desarrollo económico, entre otros.