Renovar cualquier aspecto del mundo de la fiesta siempre es motivo de riesgo, pero la alcaldesa de Castelló, Amparo Marco, ha decidido modificar un aspecto siempre sensible: la elección de la reina. La máxima autoridad municipal ha enviado una carta a las gaiatas, la Federació de Colles, los entes vinculados, la Junta de Festes y Consell Rector del Patronat Municipal de Festes en la que propone incorporar a todos los colectivos festeros en la votación de elección de las reinas de las fiestas. Marco subraya en un comunicado que «en aras a una mayor transparencia y participación, hacen razonable que esta elección pueda ser más participativa» y que integre a la mayoría de colectivos festeros.

La alcaldesa plantea así sumar a gaiatas, collas y entes vinculados al procedimiento de votación de las máximas representantes de las fiestas de Castelló con el objetivo de que la designación sea «más abierta, más participativa y más representativa». En estos momentos, según las bases que han regulado el procedimiento de elección de las reinas de las fiestas en 2018, la configuración del jurado está integrada por la presidenta del Patronat, los miembros del Consell Rector y los miembros de la Junta de Festes. Con la propuesta formulada por la primera edil, este jurado se ampliaría con gaiatas, collas y entes vinculados.

Eso sí, será ahora en el seno del Consell Rector del Patronat Municipal de Festes, tal como marcan los estatutos del organismo autónomo, donde se defina este nuevo procedimiento que incorpore a los colectivos festeros. «Más transparencia y más participación. Elementos fundamentales para hacer nuestras fiestas también más democráticas e igualitarias», señala Amparo Marco en la carta remitida. En este sentido, considera «muy positivo» que gaiatas, collas y entes vinculados puedan sumarse al jurado de votación para que «la designación de las reinas y damas de la ciudad sea ampliada también a la participación de todos los colectivos del ámbito festero». La alcaldesa considera que «las fiestas nos reclaman nuevas estructuras y organizaciones, necesarias para adaptar la actividad festiva a los cambios legislativos, económicos y sociales que la ciudadanía exige».

En la propuesta de Amparo Marco no se hace mención en ningún momento al reciente debate de si para ser reina la candidata debe haber sido antes madrina de alguna de las gaiatas. Éste fue uno de los principales puntos de discusión del pasado Congrés Magdalener, en el que el sentimiento general fue el defender el bagaje de las madrinas. En cualquier caso, no existe ningún artículo en los estatutos del Patronat Municipal de Festes donde se recoja que para ser reina antes hay que ser madrina.

En las conclusiones del Congrés Magdalener se recogió este debate. Así, se dejó patente la propuesta de numerosos ciudadanos de que el haber sido madrina de una gaiata «debe ser condición ineludible para la elección de reinas y damas de la ciudad». Por otro parte, hubo también propuestas para que «cualquier mujer de Castelló que haya participado en las fiestas, en cualquier colectivo festero, pueda acceder a los cargos de reina o dama de la ciudad». Es por ello que la conclusión final fue reclamar al Patronat Municipal de Festes que «tome una decisión definitiva», por lo que queda aún pendiente resolver este dilema. Lo cierto es que todo pasa por la renovación de los estatutos del Patronat, algo que se considera necesario para subsanar y definir aspectos que quedan abiertos a múltiples interpretaciones.

Ciudadanos

El portavoz adjunto de Ciudadanos, Manuel Paduraru, analiza por su parte que la carta de Amparo Marco abre las puertas a que se pueda elegir reina a cualquier persona que no sea madrina, aunque eso no aparezca en ninguna parte de la misiva. Así, para Paduraru estamos ante «una descarada injerencia política y un ejemplo más de la imposición del Pacte del Grau». Según Cs, «es inaudito y antidemocrático que Marco desoiga las conclusiones del Congreso Magdalenero que ella misma impulsó y que decidieron elegir a la Reina de entre las representantes de gaiatas». A su juicio, «una vez más queda demostrado que los procesos participativos son para el bipartito solo una campaña de Marketing, porque no respetan la decisión de los castellonenses si el resultado va en contra de sus propios intereses».