Se constituyeron a finales de diciembre del pasado año, hace poco más de tres meses como asociación con el fin de velar, mantener y preservar el cauce y el entorno del río Palancia en Navajas a su paso por el término municipal. Se trata de la asociación por la custodia del río Palancia en Navajas que, desde que se ideó a principios de verano, ya ha realizado múltiples actividades para poner en valor el entorno del cauce e involucrar a los navajeros en cuidar y custodiar su patrimonio natural.

Unos objetivos que, resalta uno de sus fundadores, Manolo Torres, pasan por mantener vivo el bosque de la ribera como tal, que se crea en el propio cauce a su paso por Navajas, cuidándolo para que se pueda regenerar de manera natural y se conserve como hace 150 años y por ayudar a recuperar además de la flora autóctona, la fauna.

Asimismo, la asociación pretende lanzar actividades culturales relacionadas con el entorno, promover conciertos o habilitar espacios naturales con la creación de nuevas rutas de senderismo y el mantenimiento de otras que giran en torno al río en Navajas, la limpieza de los alrededores y la creación de talleres, exposiciones y demás.

Y es por ello que, lo que hoy día es esta asociación comenzó a principios de verano tras la inquietud de un grupo de vecinos con la realización de una lista de ítems que debían desarrollarse para mejorar la calidad del Río Palancia en la población. Desde entonces y promovidos a través de distintas convocatorias bajo el lema «Diseña tu río» arreglaron y pusieron en valor fuentes, como la fuente de Rafael, trabajaron en limpiar senderos y el entorno del río de papeles y basura y crearon otras rutas como la de la subida al mirador de la Cueva del Reloj, por la que ya han pasado miles de personas o se encargaron de poner en conocimiento de la Confederación Hidrográfica del Júcar de que realizase determinadas actuaciones de tala y peligro de chopos y árboles en el cauce.

Rehabilitación

Como última actividad la asociación ha llevado a cabo la rehabilitación del antiguo merendero, ubicado junto al cauce del río, con el fin de convertirlo en una especie de espacio abierto explicativo en el que dar información patrimonial, cultural y natural de Navajas y donde poder realizar distintas actividades. Un «centro de interpretación» al aire libre que recoja en el mismo espacio y conservando su esencia, paneles informativos sobre la flora y la fauna del río Palancia, y también sobre la historia del río, la leyenda del salto de la Novia, rutas senderistas y la tradición de los enclaves, además de servir de punto de encuentro para organización de charlas o actividades varias.

Actualmente, la asociación constituida como tal cuenta con 25 socios que se reúnen una vez al mes aproximadamente aunque, como explica su fundador, Manolo Torres, está totalmente abierta a que todo el que quiera, sea de Navajas o no, se apunte y se involucre. Por el momento, los integrantes no pagan ningún tipo de cuota y todas las actividades que se han desarrollado hasta la fecha y se ha necesitado algo han sido pagadas por los propios socios. Aún así, el objetivo es establecer alguna cuantía simbólica o bien buscar otro tipo de financiaciones entre las que, como comentaba Torres, «se propondrá al ayuntamiento que saque a concurso lo que es la gestión para la regulación de la bajada al río, como comenzó a realizarse ya el pasado verano para entrar al Salto de la Novia». En este sentido, comentaba uno de los socios fundadores, «en nuestro caso nos iría bien presentarnos y ofrecernos gestionar esto bajo las premisas principales de nuestra asociación que es el cuidado del cauce del río como un espacio natural, para que no se convierta en ningún caso en un parque de atracciones». Desde la asociación, como se hace en la actualidad, se revertiría el dinero en la mejora del espacio y su cuidado.

Al igual que esta asociación, la comarca del Alto Palancia cuenta con dos más de las mismas características como son la creada en la pedanía de Peñalba de Segorbe o la constituida en Soneja, de mayor trayectoria, que cuenta con su propio vivero. Uno de los retos podría ser que más municipios se involucrasen en crear su asociación y así poder mantener el cauce del Palancia como en sus orígenes.