La patronal azulejera Ascer no contempla el cierre de las plantas de cogeneración y reconoce que el Gobierno de España es, ahora, y tras la reunión mantenida el pasado febrero en la feria Cevisama con el ministro de Energía, Turismo y Agenda Digital, Álvaro Nadal, «consciente del valor competitivo que nos aporta», ha manifestado el presidente de la patronal azulejera, Vicente Nomdedeu, en un encuentro en Madrid. Eso sí, las cosas «van bien, pero despacio» y Madrid «todavía no ha fijado la fecha para iniciar las reuniones entre ambas partes». puntualiza el presidente de Ascer.

«El sector azulejero de Castelló ha sido pionero en la aplicación de la cogeneración para aumentar la eficiencia y el ahorro energético de nuestros procesos productivos, al tiempo que somos más respetuosos con el medio ambiente. Nosotros no hacemos negocio con la electricidad, vendemos baldosas cerámicas», matiza Nomdedeu, quien afirma que el cierre de las plantas al cumplir 25 años, como marca la ley, significaría que en 2020 dejaría de funcionar, aproximadamente, el 50 % de las 28 instalaciones existentes en el sector «y llevaría a la desaparición de la industria azulejera y de sus casi 16.000 puestos de trabajo directo».

En este sentido, Nomdedeu insiste en que es «imprescindible establecer las condiciones para poder extender la operatividad de dichas plantas, así como planificar nuevas instalaciones».

Otras reivindicaciones de Nomdedeu antes las distintas administraciones «para mejorar nuestra competitividad y continuar manteniendo una posición de liderazgo exportador» pasa por un mayor apoyo a la industria innovadora y que los planes estratégicos se hagan «vayan más allá del papel y se hagan realidad». En este sentido, los costes energéticos son una de las principales trabas para el sector que lo aleja de otros mercados más competitivos. Según el presidente «la energía es uno de los principales costes para la fabricación de baldosas.