Dentro de una batalla siempre hay daños colaterales, y en este caso la víctima del conflicto que mantiene el director en funciones de la banda municipal, José Vicente Ramón Segarra, y el equipo de gobierno ha sido la Real Cofradía de la Mare de Déu de Lledó, que esta inmersa en las fiestas de la patrona durante toda esta semana. Nadie se esperaba el desenlace del concierto previsto el lunes a las 19.30 horas en el Auditori, una Cantate Mariae que no dio ni una sola nota. «Lo único que sabemos el día después es lo que leemos en los medios de comunicación, que desde el ayuntamiento no tenían constancia de esa baja, pero esperamos que se aclare y que alguien nos diga algo», señalaba el presidente de la Real Cofradía de Lledó, Ramón Vilaroig, que ayer se encontraba en Argelita siguiendo con las celebraciones de la entidad castellonense.

Vilaroig se sinceró al reconocer que «estamos muy tristes por toda la gente que hizo el esfuerzo de ir al Auditori; estamos muy agradecidos a todos los que vinieron, muchos, pero nos acompaña una sensación enorme de tristeza por no poder realizar el concierto». El presidente de la Real Cofradía insistió en que «el director no se comunicó con nosotros en ningún momento y para todos fue una sorpresa». Tras conocer su baja, «hablé con los músicos y les pregunte si podían tocar sin director, pero me reconocieron que por cuestiones como los tempos musicales debían tener una dirección, de ahí que no tuviésemos más camino que suspenderlo».

Ramón Vilaroig subraya que «aquí hay un intenso trabajo de mucha gente para preparar las fiestas, y verlo frustrado por un elemento que no controlamos, pues nos da tristeza, en especial por la gente que vino, a los que pedí perdón».

Sobre la posibilidad de recuperar el concierto suspendido durante los próximos días, destacó que «tenemos una semana cargada de actos: certamen literario, triduo, cabalgata anunciadora, la serenata... Va a ser muy complicado pero, de todas formas, ya da igual porque el mal ya está hecho», confesó Vilaroig, que espera que «no haya más sorpresas».