El Museo de Bellas Artes de Castelló acoge desde hoy la exposición 'Emilio Varela. El laberinto luminoso', organizada por el Consorci de Museus, hasta el próximo 24 de junio. La muestra ha sido inaugurada por el director del Consorci de Museus, José Luis Pérez Pont, acompañado por el diputado de Cultura de la Diputación de Castelló, Vicent Sales, y por el coordinador de la Unidad Territorial de Castelló del Institut Valencià de Cultura, Alfonso Ribes. A la inauguración han asistido también la directora del Museo de Bellas Artes de Alicante, Joserre Pérezgil, y el comisario de la muestra, Jordi Sánchez Navas.
La muestra, que está viajando por el territorio valenciano, conmemora el 130 aniversario del nacimiento del pintor alicantino y reúne 73 obras procedentes de diferentes entidades como el Museo Reina Sofía, la colección Banco Sabadell o la Fundación Caja Mediterráneo.
Pérez Pont ha señalado que "la exposición ahonda en el conocimiento de Emilio Varela como pintor, como hombre y como amante de su tierra. Con esta exposición conmemoramos el 130 aniversario de su nacimiento y hacemos partícipe a toda la ciudadanía de esta celebración, que comenzó hace unos meses en Alicante y que poco a poco va a ir cautivando a todos".
El director del Consorci de Museus ha explicado que "la muestra incluye a su vez un conjunto de obras de otros autores relevantes del siglo XX, como Julio González o Vázquez Díaz, procedentes de museos como el Reina Sofía, que ayudan a contextualizar su obra situándolo en el lugar que se merece dentro de la historia del arte español del siglo XX".
Por su parte, Alfonso Ribes ha señalado que "esta muestra conmemorativa de la obra de Emilio Varela es una continuación inmejorable de la anterior exposición que sobre él acogió el Museo de Bellas Artes y además permite continuar reivindicando a los artistas del territorio, llevando la obra de un alicantino a Castellón".
La muestra, compuesta en su mayoría por los fondos del Museo de Bellas Artes Gravina de Alicante, plantea una suerte de viaje o itinerario que se despliega de forma compleja por diferentes vías de interpretación. El laberinto recorre una dimensión esteticoperceptual en la que se analizan los procesos neurofisiológicos de la mente del pintor, así como las emociones y sentimientos que fundamentaron su personal relación con el arte.
Pérez Pont ha reconocido, asimismo, la labor tanto de los museos de Bellas Artes de Alicante y Castelló como del comisario de la muestra en el montaje expositivo, y ha recordado que "la exposición incluye una propuesta audiovisual, aprovechando las posibilidades que nos dan los nuevos lenguajes contemporáneos para conectar la obra de Varela con la sociedad actual".
La exposición dedica bloques temáticos a su contexto vital y creativo, al tiempo que propone unas rutas audiovisuales por los paisajes pictóricos que han quedado marcados de forma indeleble por la mirada del gran pintor.El visitante que se interne por 'El laberinto luminoso contará con una referencia para no perderse: el color. El magisterio cromático de Varela, cuya excelencia fue ensalzada por su maestro Sorolla, ejerce como código y eje de la visita por medio de una selección de los recursos más deslumbrantes de su paleta (azul ultramar, verde esmeralda, violeta cobalto, tierra sombra tostada y amarillo cadmio).
Resonancias con las obras de MNCARS
Como gran aliciente de la muestra figura la cesión por parte del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía de obras de siete grandes pintores relevantes del siglo XX: José Gutiérrez Solana, Vázquez Díaz, Pancho Cossío, Benjamín Palencia, Julio González, José Ribera Gómez y Roberto Fernández Balbuena.
Una de las secciones de la sala de exposiciones temporales del Museo de Bellas Artes está dedicada a las resonancias que entablan las obras del pintor alicantino con el contexto artístico y las vanguardias de su tiempo. Este espacio ofrece al visitante la posibilidad de conocer a algunos artistas como Benjamín Palencia o Vázquez Díaz, que compartieron andanzas e inclinaciones culturales con Varela y con el círculo de intelectuales que protagonizan la llamada edad de plata alicantina.
El comisario de la exposición ha señalado que "la presencia de estas destacadas obras del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS) supone un ajuste de cuentas histórico, que coloca la obra de Varela a la altura de los maestros de su tiempo. No en vano, la colección del MNCARS cuenta con dos obras de Varela".
Navas ha añadido que "gracias a esta exposición, se cumple una histórica reivindicación para dar a conocer a este artista allende de la ciudad de Alicante, en la que vivió y pintó. Ahora lo que queda por delante es la tarea pendiente de "exportar" a este gran pintor, como dijo Juan Manuel Bonet en 2005. Por fin, una muestra antológica, que tiene previsto viajar también a València y a otras ciudades, cumple este anhelo de muchos críticos e historiadores".
La exposición ha contado con la colaboración de varias instituciones que han cedido y recopilado una producción pictórica, cuya condición dispersa habría dificultado su contemplación y apreciación.
Entre las instituciones que han cedido obra a través del depósito del MUBAG, que sirve de base a la exposición, se incluyen Banco Sabadell, Fundación Caja Mediterráneo, Fundación Frax, Colección Ríos-Vila, Colección Sánchez Mateo, Ayuntamiento de Alicante y Diputación Provincial de Alicante.
El diseño expositivo combina la singularidad del laberinto valeriano con la riqueza interpretativa que propicia un espacio unitario, donde se integran los grandes artistas de su tiempo. La sencillez de la arquitectura interior, la claridad de los elementos gráficos y la organización espacial mediante códigos de color extraídos de la paleta del artista contribuyen a facilitar una emotiva contemplación pictórica, sin renunciar a la comprensión del proceso creativo del artista. Se suma a este valor experiencial la presencia de contenidos audiovisuales sobre Varela y su obra, que se proyectan en sala y que forman parte de un proyecto transmedia que el Consorci de Museus de la Comunitat Valenciana está preparando para dar a conocer la obra de este gran pintor.
Neuropercepción, concepción espacial y proceso creativo
La muestra, conmemorativa del 130 aniversario del nacimiento del artista, propone, en palabras de su comisario Jordi Navas, "un viaje apasionante por los complejos itinerarios de una mente sensible y creadora".
El proyecto expositivo propone abrir nuevas vías de estudio relacionadas con la neuropercepción del arte, la psicología artística, el método y los procesos pictóricos, el significado de la expresión cromática en la pintura de Varela, la concepción espacial de sus cuadros y la representación del espacio urbano y arquitectónico, la formación del artista y el tratamiento historiográfico que ha merecido su obra, entre otros aspectos.
