Levante-EMV, NewYork

La aspirina, además de ser un analgésico cuyos efectos anticoagulantes frenan las enfermedades cardiovasculares, también ayuda a prevenir lesiones hepáticas, según un estudio publicado esta semana en la revista Journal of Clinical Investigation.

Científicos de la Universidad de Yale (EE.UU), han demostrado que una simple aspirina puede impedir lesiones en el hígado de millones de personas que sufren los efectos secundarios de medicamentos, así como de otras enfermedades vinculadas al consumo de alcohol y la obesidad. En las pruebas realizadas en ratones la aspirina redujo la tasa de mortalidad causada por sobredosis de acetaminofeno (Tylenol).

El estudio también demostró un efecto similar al de la aspirina en un tipo de moléculas que se conocen como «antagonistas TLR» y que bloquean receptores que activan la inflamación. Al demostrarse un mejor resultado contra la inflamación producida por una lesión, el estudio sugiere que la aspirina ayuda a prevenir y tratar lesiones hepáticas causadas por agentes no infecciosos. La estrategia es ahora «administrar la aspirina diariamente para impedir las lesiones hepáticas, y si estas ocurren acudir a los antagonistas TLR para tratarlas».