Con motivo del Día Mundial de los Océanos (7 de junio), la organización WWF alertó del saqueo al que está siendo sometida la última gran frontera ecológica del planeta. La entidad recuerda que este problema tendrá graves implicaciones para la seguridad alimentaria y el modo de vida de 520 millones de personas, cuya actividad económica depende del sector. Las capturas ilegales ascienden a un valor de unos 1.000 millones de euros al año. Además, los frágiles ecosistemas de corales de profundidad y montañas submarinas están siendo arrasados por la pesca destructiva. El informe sobre Economía Verde de la ONU, presentado el mes pasado, estima que hay 35 millones de personas pescando en el mundo sobre 20 millones de barcos. A pesar del enorme valor de nuestro planeta azul, menos del 1% de los océanos del mundo están protegidos, comparado con el 14% de tierra firme. levante-emv MADRID