?

El paso de Germán Artés por la alcaldía de Beniflà, un pequeño municipio de 250 habitantes de la Safor, figurará en los anales por ser uno de los más fugaces de la historia. El cabeza de lista del PP en las pasadas elecciones ocupó el cargo el 25 de junio de este mismo año en virtud de un acuerdo con el líder de Coalición Valenciana (CV), Salvador Castellà, por el que ambos partidos se repartían cada dos años la alcaldía. Así evitaron que gobernara el PSPV-PSOE, la formación más votada en las pasadas elecciones.

El pacto se cumplió durante los dos años en que Castellà fue alcalde, desde las pasadas elecciones hasta junio, pero se ha quebrado a los cuatro meses de que Artés le relevara en el cargo.

Los dos concejales de CV firmaron y registraron ayer una moción de censura junto a los tres representantes del PSOE. El portavoz socialista, David Ribas, es la persona que asumirá la alcaldía, algo que sucederá el próximo martes 10 de noviembre.

Castellà fue claro ayer al explicar el porqué de la moción de censura. Quien fue alcalde hasta el pasado 15 de junio acusa ahora a quien le sucedió de no permitir que ejerza sus funciones como concejal de Obras, Urbanismo y Medio Ambiente. "Germán Artés se mete en mis actuaciones, no me deja trabajar y, encima, ahora hasta me niega que consulte los documentos que entran por registro de entrada".

El ex alcalde añade que, "no podemos seguir en esta situación" y que, de las conversaciones mantenidas con el grupo socialista, especialmente a partir del último pleno, "pensamos que la única salida era presentar la moción de censura".

El representante socialista, por su parte, ratificó los argumentos de Castellà, en el sentido de que el alcalde Artés "ha actuado como si tuviera mayoría absoluta". David Ribas señaló que en los próximos días los concejales se reunirán para acometer la futura gestión conjunta entre socialistas y CV, pero en lo que ahora está del todo de acuerdo es en la necesidad de "poner fin al Gobierno del PP".

Como es habitual en estos casos, la versión de Germán Artés es muy diferente. El alcalde dice que el pacto contemplaba que, durante los dos primeros años, CV llevaría a cabo su gestión "sin interferencias". "Y así se hizo", añadió Artés. A la hora del dejar la alcaldía, sin embargo, Castellà "ni siquiera ha querido abandonar la concejalía de Obras y Urbanismo".