La variante norte de Bétera es una realidad sobre el papel, pero aún no sobre el terreno. Y eso que su construcción estaba incluida en el Plan de Infraestructuras Estratégicas (PIE) 2004-2010 de la Generalitat. Es decir, tendría que estar construida este año. Para desesperación de muchos vecinos, esta circunvalación, destinada a acabar con el sempiterno colapso del tráfico en el casco urbano de Bétera, ha ido anunciándose a lo largo de estos años pero se ha quedado en eso, en un anuncio.

La Diputación de Valencia ya ha empezado la expropiación de terrenos, pero la Conselleria de Infraestructuras aún no ha dado una fecha para empezar las obras. Por el momento sólo se sabe que el proyecto se ha quedado sin consignación en los presupuestos autonómicos de este año y que será la Conselleria de Economía y Hacienda la que determinará si habrá dinero para llevarla a cabo.

Así se desprende de una respuesta del conseller de Infraestructuras, Mario Flores a la Mesa de las Corts tras una pregunta de Iniciativa en la que informa que el proyecto constructivo de la variante fue aprobado definitivamente en 2009 y que, una vez la Conselleria de Economía emita un informe, y lo autorice el Consell, se licitarán las obras. Pero hasta ese momento no se podrán concretar los datos de su programación.

En la misma respuesta del conseller se especifica también que el proyecto de la variante se acoge a la Ley 16/2008 de la Generalitat, dentro del artículo 57 relativo al precio aplazado en los contratos de gestión de obras y equipos de infraestructuras. Es decir, y tal como explicaron ayer fuentes de la Conselleria de Infraestructuras, la Generalitat sufragará el proyecto una vez terminadas las obras.

El "pago aplazado" (conocido también como "método alemán") supone trasladar a la empresa adjudicataria la financiación del proyecto. La Administración paga una vez terminado los trabajos, pero con sus correspondientes intereses de demora.

Aunque la cláusula del pago aplazado encarece las obras y está desaconsejada por organismos como el Tribunal de Cuentas, el Consell se ha reservado la potestad de utilizarla este año en una amplia gama infraestructuras públicas -entre ellas, la Ronda Norte de Bétera-, según consta en el anteproyecto ley de acompañamiento de los presupuestos de la Generalitat para 2010.

Seguramente por esta razón, la variante de la carretera CV-310 no se ha incluido en los presupuestos de 2010 como sí lo había hecho en los años anteriores. Así, en el del 2009 aparecía el proyecto Variante Norte de Bétera al que se le iban a destinar ese año 9.427,37 euros. Para 2010, el pago previsto era de 3.000 euros.