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El equipo de gobierno de la Pobla de Farnals, encabezado por Natividad García, ha aprobado una modificación de crédito para destinar el dinero sobrante de varias partidas a otros fines como la la instalación de una alarma en el polideportivo, la creación de becas para verano, la compra de mobiliario para la biblioteca y la colocación de aseos de la playa.
Y -en contra de lo previsto y después de que uno de los que habían sido sus socios provenientes del PSPV votase en contra-, lo pudo hacer únicamente gracias al voto de calidad de la alcaldesa y de que, antes de la votación, la propia Natividad García decidió expulsar del pleno al portavoz del PP.
El pleno extraordinario empezó de forma convulsa y terminó igual. Fue ya en el primer punto cuando los hechos se precipitaron. El equipo de gobierno -con cinco concejales- presentó una modificación de crédito, con el que, según fuentes municipales, se reasignaba el restante de otras partidas presupuestarias a fines "totalmente necesarios para el municipio".
El portavoz de PP (partido al que pertenecía la ahora alcaldesa) y ex alcalde de la Pobla, José Manuel Peralta, aprovechó su turno para pedir un acta de arqueo y un inventario municipal de bienes inmuebles, con los que confirmaría sus sospechas sobre la mala gestión económica del consistorio. Según Peralta, García le impidió seguir con su turno e incluso mantener la palabra. La alcaldesa asegura que fue el concejal popular quien "se exaltó", por lo que le llamó al orden en dos ocasiones. A la tercera, le expulsó.
Pero no fue una expulsión en toda regla. Según confirman ambas partes, García permitió a Peralta continuar en el pleno pero sin capacidad para intervenir o votar.
De esta forma, se procedió a aprobar la modificación de crédito, pero el equipo de gobierno se encontró con que desde las antiguas filas del PSPV -sus socios en la moción de censura contra el PP- dos de los concejales se abstenían y uno votaba en contra. Por su parte, todos los ediles populares también votaron en contra. Por lo tanto, cinco votos a favor, dos abstenciones y seis contrarios a la modificación de crédito. Por suerte para ella, la alcaldesa se percató de que se había contado el voto de Peralta a pesar de su expulsión, por lo que se declaró la decisión nula y se procedió a una nueva votación.
