Después de 33 años de actividad, el Safari Park de El Verger, una reserva zoológica que ofrecía la oportunidad de contemplar a animales salvajes en semilibertad, cerró ayer de forma "indefinida". La dirección del parque colgó en su página web un escueto comunicado en el que anunciaba que a partir de ayer el Safari Park cerraba sus puertas al público.

Sin embargo, era un secreto a voces que los últimos años no habían sido los mejores para una reserva animal que ocupa medio millón de metros cuadrados y que albergaba unas 150 especies de fauna. Situado en el término municipal de El Verger, aunque junto al Marjal de Pego, el número de visitantes de este parque zoológico ha caído en picado. La competencia de parques más espectaculares y modernos, como Terra Natura, en Benidorm, o el Bioparc de Valencia le ha pasado factura al Safari Park, que, eso sí, fue pionero en la Comunitat Valenciana en el concepto de trascender el zoo y mostrar al visitante cómo viven los animales en un ambiente de semilibertad.

Esta reserva zoológica llegó a tener 1.400 animales. El reclamo más espectacular era el recorrido en automóvil por el recinto de los animales. Los visitantes atravesaban primero un hábitat de herbívoros, luego otro de tigres de bengala y, finalmente, el de leones africanos. También destacaba el aviario, y otra de las principales atracciones era el espectáculo de leones marinos.

Impacto económico

El cierre de este parque temático, el único de la Marina Alta, tiene un impacto muy negativo en la economía de esta comarca. En sus buenos tiempos, muchas familias valencianas acudían a pasar el día en esta reserva de animales. Además, el Safari Park empleaba a veterinarios, cuidadores, al personal propio del parque, así como a trabajadores de su cafetería y restaurante.

En 33 años de actividad, el Safari Park ha sido noticia por el nacimiento de animales salvajes en cautividad, pero, sobre todo, por un suceso terrible que ocurrió en mayo de 1999. Dos ancianos de nacionalidad alemana obviaron todas las medidas de seguridad y se bajaron de su vehículo cuando se hallaban en el recinto de los tigres de Bengala. Uno de estos animales los atacó y mató.

El Safari Park ha intentado atraer a visitantes incluso con originales concursos. Uno de los más sonados fue el convocado para elegir el nombre de una cría de hipopótamo.