Salvando las distancias, la visita de la primera dama de Estonia, Evelin Ilves, a Dénia es como la de Michelle Obama de este verano a Málaga, Marbella y Granada. El paralelismo, por rebuscado que parezca, reside en que, en ambos casos, las vacaciones de la esposa del presidente se convierten en una oportunidad. Evelin Ilves mantuvo ayer una entrevista con la alcaldesa, Ana Kringe. Firmó en el libro de honor del ayuntamiento y dijo que Dénia "es un excelente lugar para practicar deporte al aire libre". También destacó su "fabulosa gastronomía". A la primera dama, la acompañó Erika Salumäe, que logró para Estonia el oro olímpico de ciclismo en Barcelona 92. A ambas les seduce de Dénia su buen clima y las posibilidades de practicar deporte. En Estonia, ese cartel turístico puede ser muy atractivo.