La tragedia que supuso la muerte del santero cubano afincado en Alzira en un accidente aéreo ocurrido en la isla a principios de mes no ha sido la única calamidad que ha tenido que afrontar la familia, que una vez pudo el sábado dar sepultura a los restos de Humberto Rodríguez tras un largo proceso de identificación -únicamente se había localizado el torso y una pierna- se ha encontrado con que las autoridades cubanas no dejan salir del país al hijo mayor de Humber, de 15 años, según ha confirmado a Levante-EMV la suegra del fallecido, que comentó que su hija Ester, que continúa en La Habana, tenía previsto realizar ayer un nuevo intento para obtener un permiso de estudiante en la embajada que permita al adolescente regresar a Alzira.

El menor es fruto de un matrimonio anterior de Humberto en Cuba y se había reencontrado con su padre en Alzira apenas tres meses antes del accidente, donde había iniciado una nueva vida. Tras el fallecimiento de Humberto el joven manifestó su deseo de quedarse a vivir en Alzira junto a su madrastra y su hermano pequeño, si bien viajó a Cuba con Ester para asistir al entierro de su padre.

La familia no ocultó desde el primer momento que su principal preocupación era el viaje de regreso, ya que no ha había dado tiempo de solicitar la nacionalidad española para el niño, si bien tras una consulta en la embajada decidió que el menor viajara al entierro. Los temores iniciales se han confirmado, al menos en el primer intento y a pesar de que la madre biológica ha dado su conformidad para que el niño vuelva a España, según comentó ayer la madre de Ester.