La Guardia Civil investiga el robo la Sénia del Malcriat, un antiguo molino de agua que, según los expertos, habría sido instalado a finales del siglo XIX en una huerta de Puçol y que, aunque ya no estaba en activo, sí que se conservaba en buenas condiciones. Esta noria hidráulica -que, con la ayuda de un caballo, un burro o una mula, sacaba a la superficie el agua de uno de los muchos "ullals" de la antigua marjal puzolana- se encontraba en un campo de albaricoqueros y su visita había sido incluida en la Ruta de l'Aigua diseñada por Acció Ecologista-Agró Horta Nord.

Tal como señala el grupo ecologista, este "expolio del patrimonio histórico de Puçol" coincide precisamente con los trabajos de señalización del itinerario de los bienes naturales y culturales de la huerta de la localidad, que también ha sido incluida en la nueva guía turística publicada por el ayuntamiento. Eso sí, pese a que se había inventariado, la "sénia" no contaba con ningún tipo de protección patrimonial

El c0lectivo sospecha que los motivos del robo podrían ser la utilización del metal de la maquinaria para la venta en una chatarrería o para utilizarla como decoración en algún chalé.

Según fuentes de AE-Agró, fueron los actuales dueños de la parcela en la que se encuentra la Sénia del Malcriat quienes se percataron de la sustracción del antiguo mecanismo a principios de diciembre. Los propietarios -que tienen la titularidad del campo de albaricoqueros desde hace alrededor de dos décadas- vieron que la cenia había desaparecido y que en el suelo permanecían las huellas de un camión en el que los ladrones habrían cargado el molino para llevárselo de allí. Cabe incluso la posibilidad de que utilizaran la fuerza del vehículo para arrancar este pequeño azud.

La "sénia" estaba instalada junto a una carretera y no estaba protegida por ninguna valla, por lo que los ladrones no debieron tener ningún problema en acceder a ella y llevársela. "Indignados y, sobre todo, tristes por el robo que habían padecido, los propietarios denunciaron los hechos a la Guardia Civil y lo comunicaron al ayuntamiento y a Agró", señalaron ayer fuentes del grupo ecologista.

En este sentido, Acció Ecologista señaló que el robo no sólo afecta a los responsables de la huerta -que habían preocupado por mantener la "sénia" pese a que ya no la utilizan- "si no a todos sino a todos los vecinos del pueblo, ya que la pérdida de este tesoro etnológico supone un ataque a la historia de Puçol y de su patrimonio". La maquinaria sustraída, continua Agró en un comunicado, "era la única de sus características que se conservaba en la huerta de esta localidad. Su espolio es comparable a un hipotético derribo del emblemático Molí de Vent de Puçol".

Según explicaron fuentes de Agró, el actual cinturón de huerta de Puçol se levantó sobre la antigua marjal cercana a la costa, por lo que era una zona rica en pozos de agua. Los agricultores solían instalar en sus campos cenias como la del Malcriat para sacar el agua al exterior. Estos molinos primitivos que eran movidos por tracción animal fueron sustituidos con el tiempo por extractores motorizados.

El que ahora ha sido arrancado del huerto de albaricoqueros sería el último molino no motorizado, y en relativo buen estado, que se conservaba.