La empresa Grupo Teresa ha presentado un Proyecto de Actuación Integrada (PAI) para urbanizar 69.332 metros cuadrados de suelo en la playa del Puig, frente al lugar en el que se situaban las casitas de los pescadores derribadas en octubre por orden del Ministerio de Medio Ambiente. Precisamente, este nuevo proyecto urbanístico -que contempla la construcción de alrededor de 500 viviendas, una zona verde, un paseo marítimo y dos zonas de aparcamiento-, implicará si se aprueba el derribo de una veintena de casitas del barrio de pescadores que se salvaron de la excavadora al quedar fuera de la zona de dominio público marítimo-terrestre.

El precio de licitación del proyecto estimado por el consistorio se fija en seis millones de euros. Ángel Teresa, gerente de la urbanizadora, ha reconocido a este periódico que la actual crisis económica favorece poco este tipo de operaciones, pero señaló que se trata de un plan "a medio plazo" que empezará a ser realidad en un mínimo de cuatro años. El empresario mostró su confianza en que el ayuntamiento respalde el PAI ya que -además del paseo, accesos, zonas verdes y plazas de aparcamiento- supondrá un aumento del suelo dotacional para el municipio.

Por el momento, Grupo Teresa -a través de su subsidiaria Teresa Hotels- es la única que ha presentado el proyecto de urbanización después de que el ayuntamiento aprobase el pasado verano las bases para la tramitación del PAI Sector Playa 1 (SP-1), a petición de esta firma que posee la mitad del suelo del sector. El resto se reparte entre pequeños propietarios que llegaron a constituir una Agrupación de Interés Urbanístico para desarrollar el sector,y que se disolvió en enero.

Según aseguró el gerente de Grupo Teresa, la empresa ha ofrecido a estos propietarios formar parte de la sociedad urbanizadora a razón de una acción por cada metro cuadrado de suelo que posean en el SP-1, aunque por el momento estas negociaciones no han prosperado.

Segundo proyecto

Ya en el Plan General de 1991 el Ayuntamiento del Puig declaró esta zona situada junto a la playa como suelo urbano, e incluso en el año 2000 Grupo Teresa propuso una alternativa técnica que acabó desestimándose 7 años después, mientras se aprobaba cerca de allí la recalificación de miles de metros cuadrados de marjal para proyectar una urbanización con campo de golf, que actualmente está paralizada. Ahora, esta empresa ha presentado un nuevo proyecto de urbanización tras sumar a sus posesiones en el sector los terrenos de una constructora madrileña que tenía el 20% del suelo.