Directamente del árbol a la mesa. Es el principal reclamo de las cooperativas, sociedades o agricultores particulares que comercializan sus naranjas a través de páginas en internet, una tendencia que va en aumento y de la que la Safor tampoco es ajena. Una de las veteranas en este canal de venta es Agrovalldigna, de Tavernes de la Valldigna, formada por 23 socios, que en total representan 124 hectáreas. Sus clientes son de Madrid y el País Vasco. Otros venden en Barcelona, Cantabria, Asturias o Galicia.

Los sindicatos agrarios ven con buenos ojos estas iniciativas, ya que en su mayoría parten de los mismos productores o de sociedades agrarias de transformación