El desdoblamiento de la esperada y necesaria carretera Bétera-San Antonio (CV-336) anunciada a bombo y platillo desde 2006 parece estar más cerca después de que ayer la Diputación de Valencia convocara una Junta de Gobierno Extraordinaria para aprobar el inicio de su contratación. El grupo socialista de la diputación votó a favor pero criticó el "importante retraso" que ha sufrido esta obra de "vital importancia para la zona".

El portavoz socialista en materia de infraestructuras, Emili Gregori, lanzó ayer un comunicado para denunciar que cinco años después de anunciarse en el Plan de Carreteras 2004-2008 "se apruebe ahora con prisas en periodo electoral y ante la nefasta planificación de la corporación provincial". La reforma del vial contará con un presupuesto de licitación de tres millones de euros para 2011 y otros seis para 2012 para la construcción de dos calzadas separadas por una mediana reducida y de vías de servicio a ambos lados de la carretera con un separador de tres metros de ancho.

El proyecto de enlace entre San Antonio de Benagéber y la entrada de Bétera es una reivindicación histórica de los vecinos ya que se trata de un punto estratégico que forma parte por un lado, del acceso a la CV-35 y por otra a lo que debería ser el origen de la futura variante Oeste. Además se trata de una zona que acumula un intenso tráfico y que actualmente se encuentra en deterioro.

A la falta de arcén hay que sumarle un pavimento en mal estado plagado de baches que ha provocado numerosos accidentes en los últimos años, convirtiendo a la vía en uno de los puntos negros de la comarca.