La fractura existente en el seno del Partido Popular de Alfafar, reparcheada una vez tras otra de un tiempo a esta parte, escenificó el martes uno de sus últimos actos con la dimisión en bloque de cuatro de los ocho concejales que actualmente tiene el grupo municipal en el consistorio. Los ediles -Antonio Muñoz, Federico Buch, José Esteve y Loreto Martínez- han alegado "diferencias sustanciales" con la dirección del grupo municipal, cuya portavoz es la también presidenta local M.ª José Bello, a la hora de justificar su abandono, tal como ha podido saber Levante-EMV de fuentes de toda solvencia.

Los cuatro regidores, que no han presentado su baja en el Partido Popular de Alfafar, han renunciado a sus actas de concejales y, con su actitud, condenan al equipo municipal popular a c0ntinuar con sólo cuatro ediles durante lo que resta de legislatura. Aunque el partido y el grupo del PP en el consistorio se apresuren a sustituir a Muñoz, Buch, Esteve y Martínez, no disponen ya de plazo para cumplir con todos los requisitos que la ley exige a la hora de ejecutar esos cambios.

La renuncia surtirá efecto a partir de mañana, cuando se celebre el pleno extraordinario y urgente que los cuatro dimisionarios solicitaron el martes a la alcaldía de Alfafar, ejercida por el socialista Emilio Muñoz. La previsión es que a lo largo del día de hoy se notifique al grupo municipal popular la convocatoria de la sesión plenaria y la razón de tal cita: la dimisión de la mitad de su equipo.

La petición de dicho pleno fue entregada a las dos de la tarde del martes en el registro de entrada del consistorio. En el documento presentado por los todavía ediles Antonio Muñoz, Federico Buch, José Esteve y Loreto Martínez, aducen "diferencias sustanciales en la manera en que se dirige el grupo municipal del PP en Alfafar y en el modo en el que se toman decisiones que en ningún caso, a nuestro entender, benefician de manera alguna a los simpatizantes y afiliados de nuestro partido y, especialmente, a los ciudadanos de nuestro municipio".

Los antecedentes

Desde febrero de 2010, las disensiones internas en el Partido Popular local han sido continuas y permanentes. En aquella ocasión, el congreso celebrado en la agrupación fue el escenario en el que se midieron los dos pesos pesados del colectivo en Alfafar: la portavoz y presidenta, Mª José Bello, y su hasta entonces mano derecha, Josefa Carmona.

Bello, que en los días previos al congreso aceptó renunciar a ser la próxima candidata a la alcaldía por el PP si a cambio continuaba ostentando el cargo de presidenta local, resultó ganadora con el respaldo del 63 % de los afiliados. Pese a que tras el congreso aseguró que la agrupación estaba unida, Carmona anunció que continuaría con su lucha, dejando así abierta la brecha entre los dos sectores del partido, una herida que ninguna ha sabido cerrar y que ahora vuelve a aflorar a la superficie con más fuerza que nunca.

Hace meses que la situación era tensa dentro del PP de Alfafar. De hecho, fue una de las últimas localidades en dar a conocer su candidato a las elecciones del 22-M debido a que no había nadie con un apoyo aceptable de los afiliados. Fueron varios los que se postularon para ocupar el cargo de alcaldable, pero uno tras otro fueron cayendo hasta que, finalmente, el comité electoral local decidió apostar por una cara nueva: Juan Ramón Adsuara. El nombramiento no consiguió contentar al sector crítico, que llegó a recurrirlo ante el comité electoral regional.

La semana pasada el candidato visitó LevanteTV para participar en el programa de información electoral "Raonem Poble a Poble" y, fuera de micro por falta de tiempo, explicó que las diferencias internas no eran tales, sino "dos o tres personas" descontentas y que la situación no era "diferente a la de cualquier otro partido". Al parecer, estaba equivocado.