El mismo día en el que el conseller de Educación, Alejandro Font de Mora, anunciaba un nuevo decreto para aunar en una sola línea castellano, valenciano e inglés, los profesores del CEIP Virgen del Carmen de l'Eliana se unieron a la campaña "duelo por la enseñanza pública" de la plataforma Educación Pública. Vestidos totalmente de negro acudieron ayer al centro a impartir sus clases como forma de protesta contra los recortes económicos y de recursos humanos que la Generalitat Valenciana empezará a aplicar el próximo curso y para reclamar una escuela pagada por todos y de calidad.

Desde el colegio aseguran que esta iniciativa se celebrará a partir de ahora todos los lunes y hasta final de curso e invita a unirse a padres, madres y niños a lucir prendas negras y oscuras o llevar un brazalete en señal de luto. Los profesores del Virgen del Carmen centran su protesta en uno de los ejes que consideran imprescindibles, la falta de profesores de lengua extranjera. Según denuncian, los niños de infantil de 3 y 4 años no tienen inglés y los de 5 reciben una sola sesión semanal de 45 minutos, gracias a la voluntad de dos maestros de apoyo que tienen conocimientos en este idioma.

Esto, según una de las maestras, perjudica a los centros grandes y supone una discriminación frente a otras escuelas pequeñas donde solamente existe una línea y un especialista en inglés es suficiente para atender a los cursos de infantil. "En mi colegio tenemos tres líneas y solo dos especialistas de inglés, por lo que estos profesores no tienen horario suficiente para atender a los más pequeños", explica y añade que de esta manera "siempre seremos el país donde menos se domina la lengua de Shakespeare".

Clases con más de 35 alumnos

El próximo curso se eliminarán varias unidades en la formación no obligatoria, con el consiguiente aumento de los ratios que en algunos casos superarán los 35 alumnos. Será el caso en la comarca de Camp de Túria de los institutos de Benaguasil y Ribarroja, donde se ha aprobado ya la supresión de dos y tres clases respectivamente, con el consecuente perjuicio para la enseñanza pública. La movilización se extendió ayer también a otras localidades de la Comunitat Valenciana como Torrent, Paiporta, Alfafar, Campanar, Requena, Catarroja o Dénia a la que se unieron decenas de educadores y padres de alumnos.