Un kilo de anguilas, otro de patatas, aceite de oliva, pimentón dulce, una pizca de guindilla, sal y agua. Siguiendo esta cerrada lista de ingredientes, se dieron cita ayer en Catarroja 123 cocineros y cerca de 3.000 paladares ávidos de encontrar el mejor "all i i pebre".

La localidad valenciana celebró la 41ª edición de su concurso internacional del tradicional guiso y registró una más que notable asistencia de público. El buen tiempo acompañó durante toda la jornada, y familias y grupos de amigos no dudaron a la hora de participar en un certamen ya asentado en el panorama gastronómico de la Comunitat Valenciana.

A pesar del proclamado carácter universal de la cita, los tres participantes galardonados en el concurso de este año son vecinos de Catarroja: Soledad Ramón -que recibió un premio en metálico de 180 euros-, Francisco José Grau -120 euros- y Soledad Serrano -90 euros-.

Sus guisos fueron seleccionados por un jurado de expertos comandado por la comunidad de pescadores de Catarroja. Miguel Raga es su presidente desde hace nueve años y acude al concurso desde hace veinte. Destacó el gran nivel de los platos presentados y explicó que "a la hora de premiar un 'all i pebre' valoramos muchos aspectos diferentes. Nos fijamos en el punto de picante, en su impacto visual, en el color y en el gusto. Todos los matices son importantes. ¡Quién mejor que los hombres que pescan las anguilas para evaluar los resultado de los guisos!".

Secretos de cocina

Mientras los pescadores degustaban los manjares, en los fogones se daba cita un heterogéneo grupo de expertos "cocinillas", repartidos entre dos facciones principales: los veteranos de mil y un guisos, y los noveles que quieren seguir la tradición culinaria del municipio. Ramona García y Antonio Romero forman parte del grupo de los más experimentados. Con más de 18 concursos en sus espaldas, este matrimonio de Catarroja comentó que "el secreto es esperar y observar el puchero. Hay que tener paciencia. Mucha paciencia".

A su lado, y utilizando una olla de hierro colado idéntica, se encuentran Jose Espino y Josefa López. Este matrimonio andaluz llegó hace 46 años a Catarroja y ahora forman un tándem totalmente conocedor de los secretos del "all i pebre". Comentaron que "el secreto de este plato está en el agua. Si te pasas, no queda sustancia en el plato; si te quedas corto, se quema".

Miguel Lucas y María Silla fueron algunos de los de los cabecillas del lado más joven. Los dos son vecinos de Catarroja y su zona de influencia entre barracas se caracterizó por un ambiente más festivo, menos competitivo. Cocinaron para un grupo de amigos ataviados con una camisa del mismo tono rojo. Entre risas y cerveza, argumentaron que "somos conscientes de que hay que seguir con la tradición. Sino lo hacemos nosotros, todo se perderá en el olvido. De momento, no venimos a ganar, lo único que buscamos es divertirnos".

Todos los cocineros presentes tuvieron que utilizar de forma escrupulosa la lista de ingredientes repartida por el consistorio, a la vez que se acreditaban con el DNI a la hora de presentar el resultado de su trabajo. En juego estaba ser el mejor "chef" de la zona durante un año.

Concurso de "pesca

al rall" en Xeraco

Más de 150 participantes de toda la geografía valenciana se dieron cita en el concurso de "pesca al rall" que se disputó ayer en la playa de Xeraco organizado por la Asociación de Pesca amb Rall de la Comunitat Valenciana (Aparcova). Un certamen de carácter solidario, ya que los pescadores decidieron destinar las capturas de más de diez kilos a los niños del Preventorio del Real de Gandia. La victoria fue para Ricardo Cerveró, de Valencia, que consiguió capturar 4 kilos de pescado. En segunda posición se clasificó Vicent García, de Alboraia, con 2 kilos. García había sido el campeón en las cuatro últimas ediciones, con la particularidad de que ya ha cumplido 74 años. El tercer puesto se lo llevó Julio Mañá, de Castelló, que aunque consiguió capturar 2,5 kilos de pescado, se quedó finalmente por detrás de García porque las variedades no eran de tanta calidad como las de su rival.