El sede de la Sociedad Estatal de Correos y Telégrafos ubicada en la plaza del Convent, en pleno centro de Carcaixent, tiene los días contados. El consistorio está dispuesto a invertir casi un millón de euros, contando las subvenciones que recibirá, para que el edificio, que ocupa 414 metros cuadrados en una zona altamente congestionada, pase a mejor vida. En concreto está previsto destinar unos 600.000 euros a la compra y una cantidad cercana a los 200.000 para el derribo y la posterior ordenación.

El objetivo del consistorio es puramente estético: embellecer la zona con la creación de un gran espacio público y ampliar el número de plazas de aparcamiento en la zona. El pleno, con los votos del equipo de gobierno (PP-PSD), tenía previsto anoche dar el visto bueno a una operación que se presentó por el trámite de urgencia y que se plantea después de que los populares hayan hecho oídos sordos a las pegas que han puesto los técnicos ante la dificultad de que el ayuntamiento, inmerso en un severo plan de ajuste para equilibrar sus cuentas, pueda hacer frente a sus compromisos de pago en próximas anualidades ya que la Generalitat financia buena parte del plan a través del programa Ruralter. El pasado mes de abril el pleno ya acordó iniciar el procedimiento aunque entonces el PP disponía de una cómoda mayoría absoluta que perdió el 22 de mayo.

Realmente no hay informes en contra de la operación, pero sí advertencias sobre la dificultad que tendrá el ayuntamiento para asumir los pagos que le corresponden para desarrollar la operación que estaba previsto financiar en tres anualidades con fondos propios: 200.544 euros en el momento de la firma de la escritura (2011), 168.062 en el ejercicio de 2012 y 233.983 euros en 2013. El concejal de Hacienda, Ximo Roses, aseguró ayer que la intención del equipo de gobierno es "seguir adelante con este proyecto" y anunció que se ha producido una modificación en el proyecto "por lo que al consistorio le costará bastante menos de los 600.000 euros", añadió Roses, quien prefirió no dar más detalles sobre las cifras que se barajan en el proyecto y esperar al pleno, que se celebraba al cierre de esta edición. Pero de lo que no hay duda es de que el gobierno local está decidido a acometer la operación en plena crisis y no parece que vaya a dar marcha atrás.

Precisamente ayer, miembros del equipo de Gobierno que dirige Lola Botella trataban en las dependencias de la conselleria de Agricultura sobre las subvenciones previstas para Carcaixent dentro del programa Ruralter, un plan que cuenta con partidas previstas para financiar el embellecimiento de zonas urbanas y del que Carcaixent ha salido muy favorecido.