La crisis ha frenado en seco el estirón demográfico de una comarca que, en la última década, ha sumado 56.342 nuevos vecinos y ha crecido a una media anual de 6.763 habitantes. La Marina Alta acaba el actual año con 201.442 habitantes, 1.069 más que en 2010. La tasa de incremento de población es del 0,5 %, un porcentaje que es prácticamente de crecimiento cero. Y es el segundo año de parón demográfico, ya que en 2010 el censo comarcal sólo subió en 1.100 personas.

Ese estancamiento está íntimamente ligado al mal momento económico. La Marina Alta fue un polo demográfico de atracción mientras su economía generaba trabajo. Ahora hay 16.000 parados. Numerosos inmigrantes han hecho la maleta.

Además, diez municipios ya han perdido este año población. Si en el periodo de bonanza económica el litoral creció mucho más y abrió brecha demográfica con el interior, ahora ya no hay patrón que valga. Alcalalí, que es un pueblo de interior, ha sufrido un éxodo de 91 habitantes, lo que supone perder el 6 % de su censo. Mientras, Calp y Teulada, localidades ambas costeras, se han dejado 191 y 56 habitantes.

El caso de Calp es el más llamativo. Su depresión demográfica contrasta con su pujanza de hace nada. Entre 1996 y 2006, incrementó su población en un 77,19 %. En la última década, sumó 13.176 nuevos vecinos. En esos años, se situó entre las cinco ciudades de más de 20.000 habitantes de la Comunitat Valenciana de mayor crecimiento. Pero ahora, por primera vez en años, su censo decrece en 191 personas. Eso sí, en densidad de población nadie le gana. Tiene 1.264 habitantes por m2 (por su modelo de construcción en altura) frente a los 675 de Dénia o los 473 de Xàbia.

El censo de Pego, que es el pueblo de interior de más peso demográfico, también se ha desinflado. Ha perdido 92 vecinos. En Sagra, con una tasa demográfica negativa del -2,4 % (11 vecinos menos), la Vall de Laguar, con el -2 % (20), o Murla, con el -3,2 % (otros 20), también la curva de población va hacia abajo. Los otros municipios cuya población ha menguado son Gata, Orba y Beniarbeig.

Dénia ha sumado 228 nuevos vecinos y ya se sitúa en 44.726. La capital comarcal crece al ralentí. Xàbia ha alcanzado los 32.469 habitantes, tras sumar 560 más.

Los pueblos que todavía mantienen incrementos de población superiores al 3 % son todos del interior. L'Atzúbia lidera ese ranking, con un aumento del 5 %. En un año ha pasado de 695 vecinos censados a 730. También Benigembla, con un 4,5 %; Castell de Castells, con un 4,7 %; la Vall d'Ebo, con un 4,4 %, o la Vall de Gallinera, con un 4,8 % siguen en la senda del crecimiento demográfico. Pero todos estos pueblos son pequeños y su aumento de población apenas tiene peso en el total de la Marina Alta.