La familia de Consuelo Puig ha denunciado al Hospital Universitario de la Ribera al considerar que la paciente, que permanece ingresada en el hospital comarcal desde el pasado 30 de diciembre tras otros cuatro ingresos y altas en el último mes, está desatendida.

La mujer, de 88 años, acudió el pasado mes al hospital y se le diagnosticó una infección de orina, siendo dada de alta el día siguiente. Poco después, volvió a ingresar, al haber empeorado, y esta vez le extrajeron pus del riñón, según explica su hija, Consuelo Viñoles. De nuevo recibió el alta, aunque sus familiares se mostraban reacios a llevarse a la anciana a casa porque consideraban que todavía no estaba recuperada. A los pocos días, volvieron a acudir a Urgencias, esta vez porque la pierna se le había hinchado y le diagnosticaron una trombosis en la pierna.

El pasado 22 de diciembre, la familia regresó al hospital por una nueva recaída de la mujer, recibió tratamiento y el alta y, de nuevo, el 30 de diciembre, la mujer ingresó con los mismos síntomas que la última vez y permanece hospitalizada.

Fuentes del hospital aseguran que las altas se producen según criterios médicos y niegan que se produzca desatención hacia ningún paciente. En el caso concreto, indican, «se le está dando la máxima asistencia médica» y arguyen que «en un mes ha estado ingresada veinte días». En este sentido detallan que se trata «de una persona muy mayor con patología múltiple» que «ya no necesita cuidados médicos sino que su problema es que no puede valerse por sí misma», por lo que necesita asistencia social.

Según ha denunciado la hija ante la Policía Nacional, el pasado martes, un médico del hospital visitó a la anciana en su habitación y le dijo a su hijo, que la atendía en ese momento, que le indicara a su hermana que esto «no es un hotel». «Díle que mañana esté aquí para solucionar este problema, que con este cuerpo no se puede hacer nada», reproduce la denuncia. Asimismo, la familia se queja de que «cuando solicita el diagnóstico no encuentra respuesta alguna por los mismos facultativos del hospital», algo que fuentes del centro niegan con rotundidad.