La Conselleria de Turismo, Cultura y Deporte acaba de publicar una resolución en la que acuerda proteger y delimitar el entorno del castillo de Polop de la Marina, monumento declarado Bien de Interés Cultural. Por tanto, se especifican cuáles son los usos urbanísticos, culturales o turísticos, que podrán llevarse a cabo alrededor de la fortaleza, y se limitan o prohíben otra serie de actividades. Cualquier actuación en el inmueble o sus alrededores deberá ser autorizada por la Dirección General de Patrimonio. Además, se suspenden licencias de obras en toda la franja de salvaguarda del edificio.

Particularmente, se protege también la silueta paisajística y arquitectónica del conjunto histórico, impidiendo que se pueda dañar con otras construcciones. En caso de intervención, los edificios tradicionales del entorno también deberán proteger sus fachadas. Sólo los anteriores a 1940, disfrutarán de 3 plantas. La altura máxima queda estipulada en 9 metros. Las cubiertas tendrán una profundidad de 11 metros y sólo se admitirán tejas árabes.