La Escuela Oficial de Idiomas de Llíria lleva tres días sin calefacción y tanto profesores como alumnos han asistido a las clases con las chaquetas y los plumíferos para poder soportar las bajas temperaturas que han sufrido en la localidad en estos días invernales.

La dirección del centro no puede pagar a los proveedores del gasóleo para poner en marcha la calefacción del edificio porque el Consell debe las transferencias de dos cuatrimestres de 2011. Además, esta escuela comparte edificio con el instituto Camp del Túria, es decir, por la mañana es instituto y por la tarde Escuela Oficial de Idiomas, con lo que el número de alumnos privados de una educación de calidad y de un desarrollo normal de las clases es todavía mayor si cabe.

Desde Compromís se ha reclamado a la Conselleria de Educación que adopte las medidas económicas que correspondan para pagar los atrasos a todos los centros educativos, tanto públicos cómo concertados, mientras que el ayuntamiento manifestó su deseo de "resolver el problema lo antes posible y seguir trabajando para que los centros educativos del municipio cuenten con las mejores condiciones".

La situación actual de quiebra financiera está haciendo que prácticamente todos los centro docentes (colegios, institutos, conservatorios, etc..) estén sufriendo restricciones que culminan en la precarización de la enseñanza. Un hecho que unido a los recortes de horas de jornada laboral en el profesorado interino tendrá como consecuencia un deterioro sin precedentes de la calidad educativa.