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¿Cómo explicaría a alguien ajeno a lo que ha sucedido en Alberic que los propios concejales del PP presentan una moción de censura a su alcalde siete meses después de las elecciones?

Es muy complicado, eso era impensable hace siete meses, pero se le podría explicar fácilmente diciendo que antes de la investidura ya había habido algún movimiento por parte de algunos concejales del PP, que fueron a hablar con un vicepresidente provincial. Hay testigos de esa entrevista en la que se ofrecía mi cabeza a cambio de un pacto entre el PP y CVa, antes de tener las actas de concejales.

¿Por qué?

Esa pregunta yo no la puedo contestar. Yo estuve hablando el día 13 de julio con Antonio Carratalá para, si me había equivocado en alguna cosa puntual, ver cómo podíamos reconducir el tema. La respuesta fue: "esto es irreconducible, si quieres hablar con los demás, hablas". Es evidente con esa actitud que la cosa estaba clarísima.

El presidente comarcal dijo que lo único de lo que se le puede acusar es de haber incluido a los críticos en su candidatura, pero Vd. también acabó sin hablarse con los ediles del PP en el anterior mandato. ¿Tan malos son todos?

No, aquí no son buenos ni malos. Cuando hice mi candidatura pensaba que eran las personas idóneas, de hecho, a algunas de ellas las conocía desde hace tiempo, pero empezaron a hacer una serie de movimientosÉ, querían obligarme a firmar un documento ante notario para que mi hija no fuera mi secretaria, que iban diciendo, y ni mi hija ha sido mi secretaria ni tengo ni secretaria porque el ayuntamiento no puede soportar esos gastos; que me tenía que dejar la dirección del colegio,É. Ante esa falta de confianza, te puedes imaginar. Yo pensaba que era la gente idónea para poder trabajar por el PP en Alberic, después ha pasado lo que ha pasado y ha salido lo que ha salido.

¿Qué parte de culpa asume Vd. en la nueva crisis?

Todos tenemos culpa, pero cuando dos personas no quieren dialogar, siempre habrá una que tendrá más responsabilidad que la otra. Yo, desde siempre, he dejado la puerta abierta para que la gente pudiera incorporase y pudiéramos trabajar todos juntos. Lo que no es admisible es que los seis concejales del PP prefieran reunirse con CVa antes que con su alcalde, con su alcalde nunca han despachado ni han hablado. Se les ha convocado a varias reuniones y nunca han venido, hay testigos.

La propuesta de asignarse un sueldo de casi 51.000 euros no es por tanto el origen de la ruptura.

No, porque ya venía de antes.

Los últimos plenos han sido realmente tensos y hay quien interpreta que el pueblo no le quiere. ¿Qué le dicen por la calle?

Me dicen todo lo contrario, que la gente ha votado a una lista del PP que encabezaba yo, que el alcalde electo del Alberic soy yo y que, por lo tanto, tengo que seguir como alcalde. Tenemos la desgracia de que unos pocos hacen mucho ruido y transmiten una sensación que no es real, pero la mayoría de la gente sabe a quién quiere de alcalde, que es al que eligió en las elecciones municipales y su alcalde soy yo.

El nuevo gobierno investigará aspectos que considera poco claros. ¿Teme esa investigación?

No, yo diría aún más, me gustaría que la hicieran, pero no de los últimos ocho años, de los últimos doce. No tengo ningún inconveniente en que investiguen lo que tengan que investigar. Es muy fácil decir ocho años, pero yo querría doce años, que él también estaba.