El Ayuntamiento de Carcaixent se ha quitado de encima uno de los principales quebraderos de cabeza que angustiaban al equipo de gobierno para 2012, el del vencimiento de deuda. Lo ha hecho a costa de elevar considerablemente su particular prima de riesgo, es decir de pagar más intereses por sus préstamos.

El consistorio que preside Lola Botella ha acordado con el BBVA la refinanciación de tres operaciones de crédito por valor de 5,1 millones de euros y en las tres llama la atención que el PP ha negociado un período de carencia que le evita pagar amortización de capital durante los próximos tres años. Así, la actual corporación ya no tendrá que preocuparse por los 5,1 millones de euros.

La primera amortización de capital vence en junio de 2015. Las próximas elecciones municipales están previstas para el domingo 31 de mayo de 2015, por lo que aún no se habrá constituido la próxima corporación y probablemente Carcaixent no tenga ni alcalde electo cuando deba de hacer frente al primer vencimiento de capital de los 5,1 millones que ahora refinancia.

"Oxígeno" a más interés

El equipo de gobierno logra oxígeno en forma de créditos a costa de que el banco, en este caso el BBVA, le endurezca sensiblemente las condiciones. Donde antes pagaba un interés del euríbor a tres meses más dos puntos, 0,45 y 1,90 respectivamente en cada uno de los tres créditos, ahora pagará el euríbor más tres puntos.