La vecina de Burjassot Felisa Montero y su hijo Pedro -con una discapacidad del 67%- continuarán defendiendo su casa, pendiente de una orden de desahucio. La Plataforma de Afectados por las Hipotecas (PAH) impidió ayer por la mañana, de forma provisional, el desalojo por medio de una concentración que contó con el apoyo de la Coordinadora pel Dret a l´Habitatge, el 15-M, EU y los vecinos. La comisión del Juzgado de primera instancia número 4 de Paterna, que se presentó a las 11.30 horas, no logró entrar en la vivienda de Felisa y ejecutar la orden prevista.
Situados frente al portal del edificio donde se encuentra el piso, decenas de manifestantes protestaron por «los abusos que los bancos y la ley están cometiendo contra personas en grave riesgo de exclusión social». En medio del estrépito de cacerolas y pitos, corearon «Este desahucio lo vamos a parar», «Açò no s´entén: gent sense cases; cases sense gent», «Ni una persona sin hogar», entre otras consignas. A la protesta se unieron los bocinazos de los vehículos que pasaban por la calle.
