Ya ni los pueblos están para muchas fiestas. En Parcent, este año no hay festeros que organicen las tradicionales fiestas patronales de Sant Llorenç. De ahí que el ayuntamiento haya asumido esa labor y se haya marcado el reto de hacer, con un presupuesto muy ajustado, las mejores fiestas posibles. Atrás quedaron los años de tirar la casa por la ventana. El consistorio, gobernado por Coalició Democràtica de Parcent, ha tenido que suprimir numerosos actos, como los bous al carrer (el pasado año se mantuvieron dos días de toros), el correfocs, la cordà (en 2011 ya se cayó del programa) y la cena de alcaldes. Además, recorta las actuaciones musicales y rebaja en un 60 % la dotación económica para las partidas de pilota.

Al no haber festeros, de entrada, el presupuesto de las fiestas se había reducido en un 32 % respecto al pasado año. Se quedó en 47.000 euros. Pero los últimos recortes todavía lo han adelgazado más. Las fiestas de Sant Llorenç costarán 35.000 euros. El ayuntamiento aportaba 18.000 euros, pero ha bajado la subvención a 15.000 euros.

Con todo, las fiestas mantienen sus actos más representativos. Los festeros del pasado año han arrimado el hombro de forma importante. Organizan una discomóvil, tres días de pasacalle con dolçaina y tabalet, una tarde de parque acuático, la batucada y la mascletada nocturna que cierra el 18 de agosto esta celebración.

Así pues, el gobierno local recorta en pólvora (cordà y correfocs), cuchipandas y en los espectáculos taurinos que no suelen faltar en las fiestas grandes de la comarca.