La Pobla medieval d'Ifac tuvo una trama urbanística planificada. Los arqueólogos y voluntarios que participan en la octava campaña de excavaciones han hallado una calle perpendicular a la principal que demuestra que la construcción en los siglos XIII y XIV de esta villa respondió a un diseño urbanístico previo.

Esta calleja, de 1,30 metros de ancho, discurría paralela a la muralla una vez se superaba la compleja cámara de ingreso a la Pobla d'Ifac. Así, mientras la calle principal llevaba a la iglesia gótica de Nuestra Señora de los Ángeles, esta otra conducía a una segunda plataforma de casas que estaba a más altura.

La villa medieval, de hecho, aprovechó el desnivel de la ladera del Penyal d'Ifac para organizar una trama urbana de terrazas.

"Tenemos ciertas esperanzas de que este callejón se dirija hacia la segunda plataforma habitada, estableciendo así un urbanismo jerarquizado, si bien no ortogonal del todo, pero ordenado y previamente planificado como sabíamos por las fuentes documentales", precisó el arqueólogo del MARQ José Luis Menéndez en el blog en el que, casi a diario, informa de los avances de las excavaciones.

La calle comenzaba con un escalón formado por piedras planas a modo de umbral. Tenía un pavimento de mortero de cal y tierra muy compactos, similar al documentado en la calle principal. Su trazado ha aparecido bajo una zona de derrumbes.

Ahora que a la campaña de excavaciones ya está en sus últimos días, los arqueólogos han dado un paso importante al lograr evidencias arqueológicas de cómo fue la antigua Pobla d'Ifac. El urbanismo ya en esta villa del siglo XIII no era caótico, sino que obedecía a una planificación previa. El almirante Roger de Llúria pidió en 1298 permiso para fundar la Pobla d'Ifac.