«Van a pagar justos por pecadores». Esa fue la primera reacción entre funcionarios del Ayuntamiento al conocer que 69 de ellos han visto reducidas sus nóminas de agosto porque acumulan desde el 1 de marzo más de 15 días de baja por enfermedad común y en aplicación de un decreto de medidas de ajuste del Consell aprobado en enero y que entró en vigor ese mismo mes. Entre los trabajadores municipales a los que se les desquita hasta un 40% de sueldo al aplicarles esta medida se encuentran dos funcionarios que siguen tratamientos por cáncer y otro operado de menisco, según confirmaron fuentes sindicales y del propio equipo de gobierno del PP.

El Ayuntamiento, como otros tantos y hasta febrero, pagaba junto a la Seguridad Social el 100% de las retribuciones a los trabajadores de baja, pero a partir de marzo y cuando el empleado acumula 15 días de incapacidad laboral tiene la potestad de aplicar la nueva norma al punto de no tener que pagar su parte al trabajador, quien sólo sigue cobrando de la Seguridad Social. El funcionario, por tanto, percibe del día 16 al 20 de baja común el 60% de la nómina por parte de la Seguridad Social (el Ayuntamiento se ahorra un 40%) y el 75% a partir del día 21 (el Ayuntamiento no paga el otro 25%). El Consell en julio se ahorró 27 millones por este concepto y se redujeron en sus órganos las bajas en un 47%.

El equipo de gobierno torrevejense ha asumido este decreto de la Generalitat del 5 enero de medidas urgentes para la reducción del déficit público que le permite dejar de complementar el sueldo y ha comunicado a los afectados que se lo va a deducir a partir de la nómina de agosto. Lo que ha causado mayor polémica es que lo haga con carácter retroactivo desde la fecha en el que entró en vigor el decreto. Miembros de la junta de personal -órgano que ayer no quiso pronunciarse oficialmente sobre este asunto- aseguraron que se había hablado de la aplicación del decreto en distintas reuniones, pero en ningún caso se dijo que se iba a hacer efectivo.

La Generalitat enmendó parte de su propio decreto el pasado 16 de julio al contemplar casos especiales para los funcionarios afectados por enfermedades graves a los que ya se les podrá completar todo el sueldo, aunque si se les aplica las reducciones de los meses anteriores. El ajuste ha supuesto ya un ahorro de 70.000 euros en sueldos.

"No es popular, pero hay que cumplirlo"

«Esta no es una medida popular pero es lo que dice la ley y hay que cumplirla», aseguró la concejal delegada de Personal, Dolores Albaladejo, sobre las deducciones aplicadas a los trabajadores que han acumulado más de 15 días de baja por enfermedad común desde el 1 de marzo. Albaladejo dijo que fue el área de Tesorería la que advirtió «Poco después de que entrara en vigor el decreto que habría que aplicarlo. «No me gusta cargar con el trauma que supone deducir el sueldo de un trabajador además por una enfermedad, pero es lo que dice el decreto y es lo que nos han recordado los técnicos. Nosotros no podemos pensar si es algo que quita votos, tenemos que aplicar la ley», especificó Albaladejo, quien matizó que el asunto, al contrario de lo que sostienen fuentes sindicales, se hubiera hablado en varias reuniones de junta de personal antes de que la medida se notificara a los afectados. Albaladejo informó que el 16 de julio un decreto matizaba al anterior indicando que existen enfermedades comunes graves que se pueden considerar una excepción a la regla y que se «salvan» de la norma para que estos puedan recibir sus retribuciones al 100%. La edil explicó que a la mayoría de los afectados se les deducen cantidades pequeñas durante los próximos meses.d.p. torrevieja