?

El cierre de las urgencias nocturnas en los centros de salud de Pedreguer, Gata, Ondara y El Verger tiene todos los números para acabar en los tribunales. Los alcaldes de los nueve municipios afectados discrepan de la velocidad de las reivindicaciones. Pero los munícipes de Pedreguer, la Llosa de Camatxo y Benidoleig, los tres del Bloc, así como el de Jesús Pobre, del PSPV, tienen cada día más claro que al final se verán abocados a presentar un contencioso administrativo contra Marina Salud, que es la empresa que gestiona la sanidad en la comarca, por incumplir el contrato de gestión y el pliego de cláusulas administrativas. El munícipe de Pedreguer, Sergi Ferrús, insistió ayer en que están estudiando ir a pleito.

Mientras tanto, los alcaldes de los nueve pueblos afectados por el cierre de las urgencias nocturnas están de acuerdo en el fondo (reivindicar que se vuelvan a prestar esas guardias), pero discrepan en la forma. La división volvió a escenificarse ayer. Los cuatro alcaldes citados clamaron contra el agravio comparativo creado por la conselleria de Sanidad al escuchar la "ansiedad social" que provocaba el cierre de urgencias en Teulada, Benissa y Orba y paralizar esa segunda tanda de recortes y, en cambio, hacer oídos sordos al clamor para que se dé marcha atrás en Pedreguer, Gata, Ondara y El Verger. El alcalde de Pedreguer criticó que se creen "ciudadanos de distintas categorías" y el de Jesús Pobre, Javier Scotto, lamentó que "haya pueblos de primera y de segunda según el color político". El munícipe de la Llosa, Francesc Costa, todavía fue más explícito: "Parece mentira que en el siglo XXI todavía existan blancos y negros. Es muy deprimente".

Ferrús denunció también que los cargos de Sanidad convoquen a reuniones sólo a alcaldes del PP. Y dijo que no se entendería que los munícipes populares antepusieran los intereses de partido a los de sus ciudadanos.