La posibilidad de que la perra que una pareja encontró malherida el sábado en Alzira haya sido utilizada como sparring en peleas en el barrio de l'Alquerieta no sorprende a los residentes. "No nos viene de nuevo, aquí es una práctica habitual", comentó ayer un portavoz autorizado de la asociación de vecinos, que denunció que también se organizan peleas ilegales de gallos.

"Sólo hace falta darse una vuelta por el barrio a determinadas horas para ver a niños con perros de razas potencialmente peligrosas e incluso con gallos en la mano", señalaron las mismas fuentes, mientras comentaban que hay zonas por las que, debido a la configuración del barrio, "no entra nadie" y se convierten por tanto en lugares idóneos para celebrar este tipo de peleas ilegales, habitualmente en corrales de viviendas que por sus dimensiones lo permiten aunque, en otras, incluso en algún descampado de la parte alta de l'Alquerieta, según las mismas fuentes.

Desde la asociación de vecinos señalaron que desde hace "tres o cuatro años" se ha detectado un incremento de este tipo de peleas en base a la comentarios y quejas que los residentes hacen llegar a la entidad y que, indicaron, ésta traslada a la policía, si bien dijeron desconocer si se ha realizado alguna intervención al respecto. Sí recordaron que hace "ocho o diez meses" a una vecina del barrio le robaron un perro, que apareció muerto días después en un contenedor de basura, supuestamente tras haberlo utilizado en alguna pelea. "Las peleas son una práctica habitual", incidieron, mientras comentaban que en esta ocasión sí se presentó una denuncia formal. La protectora Lacua de Alzira denuncia la celebración de peleas ilegales tanto en l'Alquerieta como en barrios marginales de otros municipios de la Ribera.