El drama social del paro dejó ayer por la mañana en Almussafes una de las imágenes más impactantes de las que se recuerdan en la Ribera como consecuencia de la actual crisis económica. Más de 2.000 personas, según los cálculos municipales, colapsaron desde primera hora de la mañana los accesos por carretera al casco urbano, una estampa que se repetía en el edificio del centro cultural, donde una muchedumbre aguardaba apretada en su interior y también en la explanada exterior con la intención de asistir a un taller de orientación sobre cómo trabajar en Ikea Alfafar, organizado por la Agencia de Desarrollo Local.

A pesar de que se trataba de un curso con un número de plazas limitadas -alrededor de 50-, dirigido exclusivamente a los almusafenses y para el que se requería preinscripción previa, la confusión creada días antes a través de las redes sociales después de que al parecer un particular difundiera el rumor de que se trataba de un proceso de preselección en el que se iban a recoger currículum vitae, provocó una afluencia masiva que desbordó a los organizadores. Ni el esfuerzo de los técnicos de la ADL a través de diversos canales por negar la falsa información, ni los desmentidos que tuvieron que dar los trabajadores municipales frente a la avalancha de llamadas de toda España consiguieron disuadir a los asistentes.

El bulo había tomado ya tal magnitud que el efecto llamada resultó imparable. Como muestra un botón: el cartel anunciador que la empresa responsable de impartir el curso había colgado en Facebook llegó a ser compartido más de 6.000 veces. Aunque no fue el único canal de difusión: mensajes a través de Whatsapp, sms, correos electrónicos e incluso el boca a boca propagaron falsamente la idea de que se trataba de un proceso de reclutamiento laboral. Según pudo comprobar Levante-EMV hubo hasta quien vino en coche desde Galicia y Cataluña con la idea de postular para un puesto de trabajo. Otros llegaban incluso con cartas de recomendación en la mano. Fueron tantos los congregados, que el consistorio optó por habilitar el salón de actos -con un aforo para 478 personas- para impartir la charla. En un principio, se preveía realiza solo una para los preinscritos, pero finalmente se tuvieron que ofrecer dos abiertas al público en general de una menor duración para tratar de dar respuesta a la ingente demanda y evitar que el asunto se les fuera de las manos, no sin dejar de insistir en que el consistorio no tiene ninguna relación con la multinacional del mueble, ni iba a recoger ningún currículum.

A pesar de los dos pases, muchos tuvieron que presenciar de pie la clase sobre Ikea que ofreció la orientadora laboral Nuria Ramírez, mientras que otros desistieron en su intento y optaron por marcharse decepcionados. Entre los perfiles de los asistentes se podía encontrar a toda clase de gente, desde jóvenes hasta matrimonios que superaban la cincuentena.

Alfafar decide pedir responsabilidades

El Ayuntamiento de Alfafar estudia emprender acciones legales contra la docente del taller formativo Trabajar en Ikea Alfafar 2014, organizado por la Agencia de Desarrollo Local (ADL) de Almussafes para desempleados de su municipio. El curso ha congregado este martes a unas 2.600 personas, 600 de ellas ante el consistorio de Alfafar, con la consiguiente movilización de agentes de Policía Local y técnicos laborales para atender a estas personas, que "se sentían engañadas y exigían responsabilidades a Alfafar".