El cura de Beniparrell, el mismo que este verano colgó en los nichos del cementerio la deuda que cada familia tenía por las obras de rehabilitación del camposanto y de quien el alcalde de Albal ha pedido su destitución, advirtió ayer a los feligreses que la parroquia sólo rezará por los difuntos cuyas familias hayan satisfecho esos pagos. Las demás ánimas, al parecer, deberán seguir esperando allá donde estén.

La notificación, que ha desatado la indignación entre los vecinos, fue colgada ayer mismo en el tablón de la iglesia sobre otra que avisa a los fieles del incremento que sufrirá su deuda si no la abonan en los próximos días. En concreto, el débito subirá un 30 % y el mantenimiento anual de las sepulturas pasará a costar tres euros más (de 5 a 8 ?). Y, si eso no acaba de convencer a la feligresía, el cura le comunica que actuará judicialmente contra todos los vecinos que en los próximos 15 días no paguen lo que les exige.

Según el documento, "el impago de las cuotas (que este verano oscilaban entre los 10 y los 50 euros) ha impedido remunerar el trabajo de las personas que llevaron a cabo la rehabilitación" del cementerio, algo que el sacerdote insinúa no estar dipuesto a tolerar. "Ante tal (sic) lamentable situación provocada -advierte-, la parroquia tan sólo rezará por los difuntos de Beniparrell que sus familiares respondan con interés por ellos ante la iglesia. Firmado: el párroco".

Pero las "gestiones necesarias" para corregir la actitud de los feligreses no se quedan ahí, sino que en la comunicación, el sacerdote también indica que enviará a las casas de los morosos "un aviso para el pago del último plazo. Transcurridos diez días del mismo, por decisión legal, se verá incrementado en un 30 %".

Y, si eso tampoco da resultado, las actuaciones seguirán de manera judicial. "Durante los quince días siguientes a esta notificación -detalla el aviso colgado en la puerta del templo- podrán efectuar el pago de sus cuotas en la misma parroquia sin recibir el incremento del 30 % antes aludido. Transcurrido este plazo, el pago se tramitará a través del bufete de abogados".

Sobre el incremento de la tasa anual de mantenimiento, el cura justifica la subida de 3 euros por "la publicidad en la que se ha involucrado el cementerio parroquial".

Sin entendimiento

El desencuentro entre feligreses y párroco no se circunscribe sólo a la supuesta deuda por las obras del camposanto. De hecho, no es el pago del dinero lo que alegan los vecinos para negarse a abonar la cuenta, sino sus "dudas sobre el destino que se le dará", tal como relataron hace meses a Levante-EMV y volvieron a confirmar ayer. Es más, en uno de los avisos que este verano colgó de los nichos ya se le pedían explicaciones al sacerdote. El recibo correspondía a la sepultura de un familiar de la extesorera del cementerio y, en él, ésta prometía pagar "cuando el señor cura dé cuentas de dónde está el dinero que le dejé (12.000 euros)". Según la mujer, y muchos vecinos de Beniparrell consultados por este diario, en las cuentas del recinto mortuorio había suficiente dinero para acometer las obras de rehabilitación, "a no ser que el párroco se lo haya gastado", dijeron.