El pasado domingo casi todos los concejales de la corporación de Alboraia recibieron un correo electrónico del alcalde Miguel Chavarría con el borrador de un plan de ajuste económico diseñado por el equipo de gobierno (PSPV, Compromís y la edil no adscrita) que se deberá presentar junto al presupuesto de 2014. El regidor, que gobierna en minoría, necesita el apoyo de los partidos de la oposición (o, al menos, del PP) para impulsar este proceso de «saneamiento» de las extremadamente endeudadas cuentas municipales. Por eso se ha intentado incluir en el plan propuestas económicas presentadas durante los últimos meses por todos los grupos municipales o, al menos, los «más significativos».

Entre ellos está y pese a tratarse de un plan de ajuste que busca rebajar la deuda una bajada del IBI para 2014 que ya se llevó al pleno de ayer noche (y que aún se estaba celebrando al cierre de esta edición). Hace un mes el pleno aprobó una rebaja del IBI, aunque únicamente para las VPO. Ya entonces la oposición exigió una rebaja general de este impuesto, pero el PP se abstuvo permitiendo así que la propuesta del ejecutivo saliera adelante.

Lo que sí logró tumbar la oposición fue el aumento del Impuesto de Actividades Económicas (IAE). Pese a ello, el equipo de Chavarría incluye de nuevo el incremento de este impuesto en su borrador del plan de saneamiento para compensar así la bajada del IBI y aumentar los ingresos para poder hacer al plan de viabilidad y el presupuesto de 2014.