El gran descenso en las capturas de tellina en la playa de Gandia tiene muchas causas, entre las que figura la sobreexplotación de las áreas donde crecen estos moluscos, pero hay otras que hasta el momento se desconocía. Según consta en un estudio llevado a cabo por el profesor Miguel Rodilla, también ha contribuido a reducir la población de tellina el hecho de que cada vez llegue menos agua dulce a las playas, algo que afecta al desarrollo de las microalgas de las que se alimentan estos pequeños moluscos.

Además, han perjudicado al desarrollo de los caladeros las constantes regeneraciones de arena de playa en tramos donde se ha extraído material -la playa Nord- o en los que se ha depositado -entre Gandia y Oliva-. Rodilla añade que "ahora sabemos que los componentes de los protectores solares inhiben el crecimiento de algunas microalgas y perjudican la producción de los moluscos que se alimentan de ellas". El profesor constata que la zona donde vive la tellina coincide con la de baño, y los productos que contienen las cremas solares reducen la producción de los nutrientes. s. s.gandia