Los concejales de Compromís per Catarroja, Jesús Monzó y Martí Raga, presentaron ayer un escrito ante el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Valencia en el que piden que se inste a la Generalitat Valenciana a aplicar la «ejecución forzosa» de la sentencia que anuló el proyecto de la macrourbanización Nou Mil·lenni.

El TSJ dictó el 7 de octubre de 2011 una sentencia por la que se tumbaba el acuerdo de la Comisión Territorial de Urbanismo de la Generalitat Valenciana de 2008 que había aprobado la Homologación y el Plan Parcial del sector Nou Mil·lenni de Catarroja. El fallo judicial era fruto del recurso que planteó en su día la abogacía del Estado porque el acuerdo del Consell no tenía el dictamen favorable de la Confederación Hidrográfica del Júcar, donde se consideró que no estaban garantizados los recursos hídricos para abastecer una urbanización de un millón de metros cuadrados, con 12.000 viviendas, que triplicaría la población en Catarroja

Y en julio de 2014, el Tribunal Supremo confirmó aquella sentencia de 2011.

Para Compromís, la contundencia del pronunciamiento del TSJ no ha servido para que ni la Generalitat ni el ayuntamiento la apliquen en la otra herramienta que queda vigente: el Plan General de Ordenación Urbana, que el consistorio aprobó sin el consenso del resto años después de iniciarse la tramitación de Nou Mil·lenni, y que recoge igualmente la reclasificación de la huerta protegida para convertirla en aquella zona residencial y terciaria.