La Semana Santa de Torrent tiene algo que la diferencia del resto. El Encuentro Glorioso, un acto en el que el Ángel de la Resurrección anuncia el regreso de Jesucristo de entre los muertos, reúne cada año a miles de vecinos y visitantes.

Es un evento cargado de simbolismo pero también de colorido, único en España y de lo más esperado por los torrentinos cuando llega la Semana Santa. No en vano está declarada como Fiesta de Interés Turístico Autonómico desde 2009 y aspira a convertirse en Fiesta de Interés Turístico Nacional.

La protagonista de este año fue Gema Guillamón, Reina del Encuentro y Ángel de Resurrección de 2015, quien fue la encargada de anunciar la Resurrección de Jesucristo proclamando el Aleluya junto a sus dos camareras, Isabel Molero y Carla Silla. Estuvo acompañada por sus 11 pajes, los cuales portaron los 6 metros de su capa granate bordada en oro, la cual representa el palio de la Hermandad de la Vera Cruz y Cristo Resucitado.

Eran algo más de las 10 de la mañana cuando se produjo el momento álgido del Encuentro Glorioso. Seguidamente, el toque de corneta dio paso a la apertura de la Carxofa, desde la cual se soltaron «Aleluyas» en forma de cientos de papeles de colores con poemas escritos. También se procedió a la suelta de palomas. En ese justo instante, todos los cofrades de las hermandades de Semana Santa de Torrent descubrieron su cara culminando la gran fiesta. No se perdió ni un detalle del acto la consellera de Educación, Cultura y Deporte, Mª José Català, (exalcaldesa de la ciudad), que acompañó a la actual alcaldesa, Amparo Folgado, el presidente de la Junta Central de Hermandades, José Vicente Yago y la Hermana Mayor Suprema, Mª Teresa Daviu.

La tradición

La figura de la Reina del Encuentro y Ángel de Resurrección representa a Germana de Foix, virreina de Valencia, la cual posteriormente fue esposa del rey Fernando el Católico.

Según cuenta la tradición, De Foix visitó en diferentes ocasiones el municipio de Torrent, presidiendo el Encuentro Glorioso de la Virgen con Jesús Resucitado a principios del siglo XVI. Fue la propia virreina quien estableció que fuera una joven torrentina quien la representara cuando ella no estuviese presente en este singular acto. Desde entonces, esta tradición sigue viva.

En tanto que representa un hecho histórico puntual que afecta únicamente a la ciudad de Torrent, la figura de la Reina de la Resurrección es única en toda España. Gracias a esa singularidad este acto fue declarado Fiesta de Interés Turístico Autonómico.