La vieja estación de ferrocarril de Xàtiva, una de las más antiguas de España, amenaza con derrumbarse. El equipo de gobierno explora una salida para salvar el edificio en desuso, levantado en 1854 y actualmente en ruinas, después de que el arquitecto municipal haya emitido un informe en el que advierte de la necesidad de desarrollar un apuntalamiento de emergencia en el inmueble. El coste de la intervención, según las primeras estimaciones del ayuntamiento, ascendería a los 4.000 euros e incluiría tareas de limpieza y desbroce en el interior de la infraestructura, invadida por la vegetación descontrolada. Aunque se trata de una inversión asumible, la corporación ha de obtener el permiso del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) antes de poder actuar.
Las gestiones para recuperar la antigua estación protagonizaron una de las dos preguntas escritas a las que tuvo que enfrentarse el ejecutivo en el pleno del sábado, el primero en el que se permite a los vecinos participar e interpelar a los concejales. El responsable de Obras, Miquel Lorente, remarcó que la corporación está tratando de obtener respuesta del Adif respecto a la autorización solicitada para retomar la recuperación de la infraestructura. «No podemos hacer absolutamente nada sin permiso del administrador», advirtió el concejal antes de remarcar que, en cualquier caso, el equipo de gobierno ha estado «actuando» para «resolver la situación» tan pronto como el organismo del Ministerio de Fomento dé luz verde a los requerimientos.
En 2010, el anterior ejecutivo del PP planteó transformar la estación en un museo del ferrocarril, canalizando una ayuda de 745.000 euros del Plan Zapatero para rehabilitarla. Finalmente, la obra no se pudo materializar porque el proyecto redactado incumplía las distancias mínimas de seguridad con las vías de la línea Xàtiva-Alcoi. Adif no dio permiso a los trabajos y el ayuntamiento perdió la ayuda. Años después, el inmueble es pasto del deterioro y el abandono. «El edificio se encuentra en una situación muy grave y complicada», expone Miquel Lorente, que anuncia gestiones para tratar de «reiniciar el procedimiento con Adif» con el propósito de «hacer todo lo posible» por rehabilitar la estación.
