A partir del año 2004 una empresa denominada Key Vil, avalada con capital de bancos holandeses, empezó a construir en la montaña de Caudeli, en el término de Xeresa, una enorme mole de hormigón con vistas a levante que contemplaba la construcción de casi cuatrocientos adosados. Aquel «Balcón al Mar», como se denominó, causó sorpresa por el impacto visual que generó, similar a urbanizaciones que surgieron en los montes de distintos municipios de la Marina Alta. Aquello es una «nova Xeresa».
Cuatro años después el estallido de la burbuja inmobiliaria coincidió con la fase final de construcción de las primeras 80 viviendas, que finalmente o no pudieron venderse o simplemente no se ocuparon porque nadie estaba dispuesto a instalarse en aquella mole de hormigón si antes no tenía la garantía de contar con algunos vecinos. La crisis no remontó, las obras quedaron paralizadas y la empresa promotora, harta de esperar tiempos mejores, acabó en proceso de liquidación.
Pocos confiaban en que el «Balcón al Mar» de Xeresa remontara al vuelo hasta que hace unos meses otra empresa denominada Maisongestion SL compró a la liquidada Key Vil este mar de adosados inacabados, accesos por terminar y mucha obra pendiente antes de que los primeros vecinos puedan instalarse allí. Todo ello, obviamente, con la necesaria inversión de decenas de millones de euros.
Ayer el Ayuntamiento de Xeresa reveló que el nuevo promotor da por superado lo peor de la crisis y después de varias reuniones con el Gobierno local y los técnicos municipales y de la empresa, ha presentado un proyecto para reiniciar los trabajos. Lo más importante de este acuerdo es que, acogiéndose a la nueva legislación urbanística aprobada por la Generalitat, la empresa ha solicitado retomar las obras por fases. Así, en primer lugar sacará a la venta cerca de ochenta viviendas que están prácticamente listas, y a medida que el mercado responda terminaría otras noventa. A partir de ahí, siempre dependiendo de la evolución del mercado, se pasaría a la segunda y tercera fase.
El Ayuntamiento de Xeresa ha aprovechado este parón de varios años en las obras de la urbanización para exigir una serie de mejoras al promotor. Así, según señaló ayer el alcalde de la localidad, Tomàs Ferrandis, la empresa Maisongestion deberá entregar, al final de esta primera fase, una superficie de 13.338 metros cuadrados en la montaña de Caudeli que pasarán a ser de propiedad municipal. Allí el ayuntamiento habilitará un parque público cuyo mantenimiento también correrá a cargo de la empresa.
