La alcaldesa de Moncada, Amparo Orts, se reunió ayer con el Coordinador del Grupo Recuperación de la Memoria Histórica, Matías Alonso, y con los expertos en historia local Arturo Xerri, Antoni Benlloch y Ricard Orts, para acordar una estrategia de recuperación y puesta en valor del sistema de trincheras, fortines y refugios construidos durante la Guerra Civil en el municipio. En la reunión se acordó contactar con los colonos del barrio de San Isidro, propietarios de la parcela del Mas Blau (donde se encuentra la mayor parte de los restos), así como con el servicio de patrimonio de la Generalitat, para contar con los permisos necesarios para iniciar cuanto antes la recuperación de las trincheras.
Estas se encuentran ocultas bajo tierra en algunos tramos, aunque su estado de conservación generalmente es bueno. Durante la reunión también se propuso la posibilidad de rehabilitar el Mas Blau para alojar un centro de interpretación del sistema defensivo Puig-Carasoles a su paso por Moncada. El estado de este inmueble de estilo modernista (propiedad también de los colonos) sí es totalmente ruinoso, por lo que sería también necesario una inversión. Tanto Matías Alonso, como el arqueólogo Josep Burriel recordaron ayer la existencia de líneas de ayuda europeas para este tipo de proyectos.
De los contactos con los propietarios del suelo y con la Generalitat, así como de la búsqueda de las ayudas económicas, se ocupará el equipo de gobierno. Los técnicos municipales redactarán el proyecto de intervención para poder declarar el Mas Blau com Bien de Relevancia Local. La tercera pata del proyecto pasará por recoger los testimonios de vecinos de la localidad que conocen la situación de los refugios en el casco urbano o que trabajaron en la construcción de las trincheras.
La intención del ayuntamiento es «iniciar ya el proyecto».
