Si usted bebe alcohol en la calle en Domeño le puede salir muy caro. Así se desprende de la ordenanza municipal de convivencia ciudadana que ha aprobado el Ayuntamiento del municipio, en la que se contemplan multas de hasta 1.500 euros para aquellos vecinos que consuman bebidas alcohólicas en la vía pública sin autorización municipal. Esto se debe a que se ha considerado tal infracción como falta grave, cuya sanción oscila entre los 750 y los 1.500 euros.
Además de este supuesto, la ordenanza pública aprobada el pasado 17 de octubre también considera como graves el uso inadecuado de vías y espacios públicos, la utilización inapropiada de los materiales y enseres ubicados en el interior de dependencias municipales, el depósito de basura fuera de los contenedores, la acampada libre fuera de los lugares habilitados al efecto o el depósito de muebles en el interior de los contenedores.
Según la propia norma, el objetivo de este conjunto de medidas es «preservar el espacio público como lugar de convivencia y civismo, en el que todas las personas puedan desarrollar en libertad sus actividades de libre circulación, ocio, encuentro y recreo, con pleno respeto a la dignidad y a los derechos de los demás y a la pluralidad cultural, política, lingüística o religiosa».
Asimismo, entre las infracciones tipificadas como muy graves, con multas de entre 1.500 y 3.000 euros, se encuentran el suministro de bebidas alcohólicas en vías y espacios fuera de los lugares habilitados para ello, el acceso a los locales y dependencias municipales fuera del horario establecido o para la realización de actividades y reuniones que no cuenten con permiso municipal, además del uso de las infraestructuras de los locales municipales y dependencias oficiales, fuera del horario fijado, sin la autorización del responsable municipal o encargado. A estas habría que añadir las reiteraciones de las faltas graves anteriormente mencionadas.
Por último, las infracciones de carácter leve serán castigadas con un máximo de 750 euros. Entre ellas se encuentran acciones como la ocupación de los jardines de las aceras con materiales, escombros, enseres o vehículos, colocar tendedores en las ventanas o balcones que resulten visibles desde la vía pública, poner adornos en las ventanas como macetas o plantas de forma que puedan ser peligrosos, o instalar anuncios, rótulos o elementos publicitarios sin autorización pública.
La normativa ahora en vigor también obligará a los establecimientos públicos de ambientación musical a disponer, como mínimo, de una persona encargada de velar por la seguridad, el orden y el buen funcionamiento en el interior y exterior del establecimiento.
Por último, el Ayuntamiento de Domeño vigilará para que los propietarios de los solares ubicados en el término municipal se mantengan en condiciones de seguridad, salubridad y ornato público, exentos de basuras, residuos sólidos urbanos o escombros. Además, estos tendrán que estar vallados mientras no se lleven a cabo obras de nueva construcción.
