Médicos sin Fronteras ha atracado en el Port de Borriana uno de los barcos que han participado do en la campaña de rescate de refugiados en el Mediterráneo. El Dignity I se encuentra estos días varado en la localidad de la comarca de la Plana Baixa para su puesta a punto. A finales de diciembre, la ONG finalizó la primera parte de la campaña en la costa de Libia, donde atendió a cerca de 20.000 refugiados en las tres embarcaciones con las que cuenta en la zona.

Las labores de reparaciones y adecuación del barco se alargarán hasta el próximo 15 de febrero, cuando los diez tripulantes emprenderán rumbo hacia Sant Carles de la Rápita y aguardarán el inicio de la nueva salida al mar que llegará en el mes de mayo.

El Dignity I es una de las embarcaciones de la ONG Médicos Sin Fronteras que durante semanas ha estado realizando labores de atención y rescate de los refugiados llegados desde distintos puntos del continente africano. Allí se atienden a ciudadanos que intenta cruzar el Mediterráneo por la ruta de Siria. Proceden de puntos tan distintos como Somalia, Nigeria o Mali, además de a los miles que se han visto obligados a huir de Siria por el conflicto bélico.

El Dignity I ha rescatado cerca de 5.000 personas desde el mes de junio. Afrontó una crisis humanitaria sin precedentes en las últimas décadas. La intervención de la ONG ha salvado miles de vidas. Médico sin Frontera también dispone de otros dos barco: Argos y el Fénix.

El número de personas que cruzan el Mediterráneo en la ruta que sale desde el norte de Libia se ha reducido en los últimos meses, principalmente por el empeoramiento de las condiciones climatológicas. Ese descenso, unido al hecho de que en estos momentos «hay una cantidad suficiente de actores para lidiar con las necesidades existentes en la zona», ha llevado a Médicos Sin Fronteras (MSF) a tomar la decisión de terminar sus operaciones de rescate y salvamento en el Mediterráneo central.

La organización permanece operando en el Mar Egeo, donde cada día asiste a cientos de personas que siguen cruzando desde Turquía hasta Grecia ante la falta de opciones para entrar de una manera legal y segura y ante la inacción y pasividad que siguen mostrando la Unión Europea.

Médicos sin Fronteras haciendo una nueva llamada a las autoridades para que brinden recursos de rescate adecuados que sirvan para prevenir tragedias en los próximos meses, cuando vuelva a incrementarse la cantidad de llegadas.

A pesar del cese de operaciones de MSF en el Mediterráneo, la organización sigue preparada para intervenir en caso de que la UE y sus Estados miembros no pongan los medios para proteger las vidas de los miles de hombres, mujeres y niños que se espera huyan del norte de África hacia Europa en los meses por venir, según fuentes de la organización.