El nuevo urbanismo de chalés de lujo pone los pies en el suelo. Hasta ahora las promotoras buscaban parcelas en los acantilados. En Xàbia, en los últimos años, cuando la crisis del ladrillo más apretaba, se había reactivado la construcción en el escarpado litoral del Portitxol, la Barraca o Ambolo. El único urbanismo que tenía salida en el mercado era el de lujo, el de los chalés de moderno diseño cuyo precio superaba de largo el millón de euros. Ahora esa oferta de casas por las nubes baja a la tierra. Pero no en el precio.
Una promotora va a construir en primera línea del litoral del Segon Muntanyar de Xàbia un chalé que vende por 3.950.000 euros. La vivienda estará a pie de playa. Se asomará a una playa de piedra tosca, pero a un paso queda también la del Arenal. El nuevo urbanismo de lujo ya no se esconde en el acantilado o en parcelas alejadas del bullicio turístico.
En el Segon Muntanyar, no queda ni un hueco para construir. Pero no importa. La promotora ha comprado un chalé de los años 70 que echará abajo para construir la nueva vivienda de lujo. La ha diseñado el estudio de Xàbia Pom Arquitectos. La parcela mide 1.525 metros cuadrados y el chalé tendrá 526 m2. Contará con paneles solares y sistema domótico para controlar la climatización y las persianas. La promotora asegura que en este terreno, que está pegado al dominio público marítimo terrestre, hay un pozo de agua dulce.
Este nuevo chalé, llamado de Ultramar (es el nombre de la avenida que une la playa del Arenal y la Caleta), no es una excepción. Las parcelas en los acantilados se acaban. Hace unos meses, se derribó un viejo chalé de la calle que baja a la cala de Ambolo para levantar otra moderna vivienda de lujo. Pero en ese quebrado litoral no hay más sitio. Cada vez, por tanto, resulta más difícil encontrar terreno en las alturas.
Adiós a los porches de arcos
En la Caleta, también a un paso del mar y de la playa, hay varios chalés de 1970 y más antiguos a la venta. Y no precisamente para reformarlos. Se demolerán. La arquitectura de porches de arcos de piedra tosca (emulan a los tradicionales riuraus) tiene los días contados. Los nuevos chalés de lujo entierran una tipología que ha dominado el urbanismo de Xàbia durante décadas. Ahora se imponen los chalés de líneas rectas y grandes cristaleras y equipados con tecnología domótica. Empezaron conquistando los acantilados y ahora se abren paso en la primera línea de playa.
