Dos hombres de 25 y 32 años de edad han sido detenidos por agentes de la Guardia Civil de Gandia al ser sorprendidos, in fraganti, intentando vender más de seiscientos kilos de naranjas que habían robado en un campo cerrado situado en el término municipal de Oliva.

Según han señalado fuentes de la Guardia Civil, los dos hombres, ambos de nacionalidad española, cortaron la valla que rodea el campo olivense y penetraron en su interior, de donde se llevaron 651 kilos de naranjas.

Como es habitual en estos casos, con ese cargamento se dirigieron a una peladora para vender la naranja, pero tuvieron tan mala suerte que justo en ese momento se encontraba en el establecimiento una patrulla de la Guardia Civil dedicada a erradicar los robos en propiedades agrícolas y en las cosechas que estaba haciendo una inspección rutinaria.