Después de un largo periodo de ausencia, el Ayuntamiento de Xàtiva ha vuelto a asumir su papel institucional al frente de la organización del homenaje que cada año reciben los «maulets» en el monolito erigido en la plaza Sant Francesc. Aunque durante sus primeros años como alcalde Alfonso Rus llegó a participar en el acto central de la conmemoración de la Batalla de Almansa, su presencia terminó difuminándose en un contexto ideológico en el que Rus no se sentía cómodo.

Una comisión integrada por los tres partidos que hoy ocupan el gobierno municipal (PSPV, Compromís, EU) y una constelación de asociaciones han asumido en los últimos años la programación de la fiesta cívica del 25 de abril. Con el tripartito ahora en el ejecutivo, el consistorio ha vuelto a ocuparse de diseñar las actividades, con la colaboración de Amics de la Costera, el sindicato STEPV, Xateba, Escola Valenciana y el Consell de la Joventut y la coordinación de Toni Martínez Mollà.

El regidor de Cultura, Jordi Estellés, hizo ayer hincapié en el hecho de que el consistorio recupere su presencia institucional en el recuerdo de los acontecimientos vinculados a la efeméride del 25 de abril de 1707, «una fecha crucial para la historia de Xàtiva».