El secretario autonómico de Medio Ambiente, Julià Álvaro, y el alcalde de Riba-roja de Túria, Robert Raga, acordaron ayer suscribir un convenio que dé una solución definitiva a las actuaciones de sellado del antiguo vertedero de la Basseta Blanca. La Generalitat, de hecho, ya ha iniciado un expediente de contratación de trabajos previos en el que se realizarán sondeos técnicos y calicatas para poder acometer el selleado definitivo de una instalación que se calcula que tiene almacenados más de 800.000 toneladas de residuos urbanos procedentes de Valencia y su área metropolitana desde 1983 hasta 1993.

Robert Raga reconoció el «espíritu de colaboración» de la conselleria por esta causa después de denunciar la aparición de lixiviados „líquidos que surgen de los residuos sólidos„ que podrían contaminar las aguas subterráneas de la zona. Asimismo, recordó la «obligación» de la administración a acometer el sellado de la planta y la restauración de las basuras que asegura el consistorio que se depositaron allí una vez estaba clausurada entre 1993 y 1996.